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Torremolinos

Torremolinos ya luce la escultura de Dalí, Gala, Manuel Altolaguirre y Emilio Prados

Las obras están ubicadas en el paseo marítimo, en la zona conocida como la Punta de Torremolinos

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  • Torremolinos ya luce la escultura de Dalí, Gala, Manuel Altolaguirre y Emilio Prados. -

Torremolinos incorpora al patrimonio cultural de la ciudad esculturas de Dalí, Gala, Manuel Altolaguirre y Emilio Prados, obras realizadas en bronce y que a partir de ahora se erigen como símbolo del paso de poetas de la Generación del 27 y pintores y pensadores de la época por la ciudad.

“Desde nuestro Ayuntamiento llevamos años resaltando culturalmente la rica trayectoria de nuestro municipio, una historia ligada a grandes figuras del arte y el espectáculo que han pasado a ser también un atractivo turístico más”, ha señalado el concejal de Cultura, David Tejeiro. Ahora con la instalación de un grupo escultórico compuesto por Manuel Altoaguirre, Emilio Prados y Dalí y una escultura de Gala, artista y musa del pintor catalán, “plasmamos físicamente su paso por nuestra ciudad y complementamos el proyecto del Mirador de Sansueña que presentamos hace unas semanas”.

La propuesta está inspirada en fotografías que atestiguan las reuniones de estos artistas en nuestro municipio. “Continuamos así poniendo en valor nuestra historia y ampliando el atractivo turístico-cultural del municipio ya que además de las esculturas, instalaremos en los aledaños versos de los poetas malagueños Manuel Altoaguirre y Emilio Prados, para mayor conocimiento de las obras a los visitantes”.

La escultura de Gala además “tenemos la seguridad de que va a convertirse en un símbolo para Torremolinos”, ha resaltado Tejeiro. Inspirada en una fotografía que recoge el posiblemente primer ‘top less’ de Europa, tomada en ese mismo lugar en los años 30, no solo es un homenaje a su figura, sino toda una declaración de intenciones “al reivindicar el clima de libertad que impregnaba el Torremolinos de esa época y que ahora se sigue respirando, a pesar de los esfuerzos que se hacen desde diferentes frentes”.

La Punta de Torremolinos se convierte así en un punto de encuentro para el arte, el pensamiento y la reflexión, y sigue la línea transformadora de la ciudad que trata de combinar encanto y esencia a través del arte urbano que poco a poco van configurando un museo al aire libre de gran valor.

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