El cóctel explosivo, que no letal gracias a las vacunas, que ha supuesto el fin de la obligatoriedad de la mascarilla en espacios interiores desde finales de abril sumado a la celebración de la Feria del Caballo, ha disparado la demanda de test de antígenos al 300% en las farmacias, llegando a agotarlos en las que estaban de guardia el pasado domingo. Un reclamo que responde al “desmadre” que ha supuesto este evento en lo que a contagios se refiere, la misma radiografía de una semana antes en la capital andaluza tras Feria de Sevilla, tal y como apunta el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Cádiz, Ernesto Cervilla, que descarta, en cualquier caso, que haya problemas de stock, como sí ocurrió las pasadas navidades con la sexta ola.
Eso sí, hay farmacias donde han vendido 900 test en un solo día, en concreto el pasado domingo, jornada en la que se registraron colas en las boticas de guardia de Jerez, como también ocurrió en la recta final de la Feria. “Hay muchísimos positivos, pero son muy leves; muchos asintomáticos, cuadros de fiebre, catarros y síntomas que se confunden”, indica para referirse también a una “simple alergia”, lo que también ha duplicado la venta de antihistamínicos en las boticas.
A ello hay que sumar, que también se están dando casos de gripe A, aunque no sean graves, pero síntomas similares”. Lo que también están detectando es que los positivos están tardando en confirmarse al menos unos tres días después de aparecer los primeros síntomas, lo cual tampoco ha ayudado a frenar los contagios.
Cervilla tiene claro que con este nivel de propagación, y a las puertas de la Feria de la Manzanilla de Sanlúcar y del Rocío, el virus “se va a gripalizar”, y que esta situación se va a mantener también hasta finales de junio.
La situación, además, no tiene nada que ver con la que se vivió en diciembre en cuanto a que ya solo se notifican en el SAS los mayores de 60 años, si bien los últimos datos de ingresos hospitalarios publicados por este medio el pasado jueves sí advertían de un notable incremento de hospitalizados por Covid, con 23 pacientes en las dos plantas de infecciones y dos más en UCI. No obstante, desde el Colegio de Farmacéuticos llaman a la calma y reconocen que la situación no es ha cogido por sorpresa. El problema se hubiera dado, expone, si estos acontecimientos se hubieran dado un año atrás. “Se han juntado las primeras comuniones, el fin de la mascarilla, en espacios interiores, las ferias, había más posibilidades de contagios, pero es normal, hay que vivir”, concluye.