El presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, ha informado este martes sobre las actuaciones que se están poniendo en marcha con carácter de emergencia frente a la sequía que afecta a la provincia, desde el Área de Servicios Públicos Supramunicipales de la Institución, motivadas por la disminución de las reservas para el abastecimiento y el empeoramiento en la calidad del suministro en determinadas localidades.
"Se trata de un programa de obras de emergencia frente a la sequía dotado con diez millones, que saldrán de los remanentes de tesorería de la Liquidación del Presupuesto de 2021, y que sigue la planificación marcada desde la Mesa Provincial de la Sequía, constituida el pasado 1 de abril", detalla la Diputación en un comunicado.
Desde entonces, ha celebrado sesiones el 21 de abril y el 25 de mayo, en las que se ha hecho el diagnóstico de la situación hidrológica de los municipios afectados y "se han fijado las actuaciones de emergencia a acometer, la previsión económica y de tramitación", ha explicado Villalobos.
El presidente provincial ha anunciado también que llevará a Pleno extraordinario para su aprobación una segunda fase, con otras tres obras de emergencia: el abastecimiento a El Castillo de las Guardas, desde el embalse del Jarrama (3,9 millones); la conexión de abastecimiento desde Brenes a Villaverde del Río (1,3 millones) y la ampliación de toma y estación de tratamiento de agua potable para abastecimiento de Badolatosa y Casariche (1,3 millones).
Villalobos ha recordado, además, que hace poco la Junta declaró no apta para el consumo humano el agua de abastecimiento en El Castillo de las Guardas, por los valores anormales de ciertas sustancias químicas propiciados por los bajos niveles del embalse y las altas temperaturas. Como consecuencia, el Ayuntamiento interrumpió el suministro de agua potable a la red hasta que se restablecieron los valores normales para su consumo, "periodo en el que la Diputación ha estado colaborando en la gestión de la crisis sanitaria suministrando agua potable a los vecinos".
El Castillo de las Guardas se abastece principalmente del embalse de La Reserva, "hoy en mínimos históricos". En esta actuación se trabaja en transferencia de aguas superficiales desde el embalse del Jarrama, de la cuenca hidrográfica del Tinto, Odiel, y Piedras. Al respecto, se han mantenido diversas reuniones con ambas Demarcaciones Hidrográficas y se ha solicitado la pertinente concesión de aguas. "Estamos ante un proyecto de gran complejidad, que incluye la ejecución de captación en embalse, bombeos de impulsión hasta cota del depósito, nueva tubería, así como la expropiación y servidumbres de paso en terrenos afectados".
En Villaverde del Río "están mermadas en calidad y cantidad sus captaciones subterránea actuales", lo que motiva que se esté trabajando en la conexión del depósito general con la red en alta existente en Brenes, que está integrado en el Consorcio de Aguas del Huesna. Se trata de un proyecto con una peculiaridad técnica, ya que es necesario que la nueva conducción cruce el río Guadalquivir a través del puente existente en la carretera autonómica.
Por último, en Badolatosa y Casariche, la actuación se centra en ampliar la toma existente en el embalse del Malpasillo y modernizar y ampliar la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) existente, para lo que se prevé la instalación de equipos de bombeo para hacer reversible la actual conexión del depósito de Badolatosa con el depósito general de Casariche.
Visto bueno del plenario a la primera fase
La Diputación aprobaba el pasado 22 de junio, en el transcurso de una sesión plenaria extraordinaria y urgente, las tres primeras obras de emergencia frente a la sequía en la provincia: la construcción de las infraestructuras necesarias de captación e impulsión para el abastecimiento, desde el nuevo sondeo en el Cerro de la Cruz con el depósito El Puntal, en Casariche (2,31 millones); la conducción de abastecimiento desde la impulsión de Cerro de la Cruz hasta depósito de Pedrera (935,000 euros) y la adecuación del sistema de bombeo en captación subterránea para abastecimiento de Coripe.
En esta primera fase, los municipios beneficiarios (Pedrera, Aguadulce, Casariche y Coripe) tienen declarada la emergencia no catastrófica por la insuficiencia de recursos hídricos disponibles. El objetivo de las actuaciones es incorporar nuevas fuentes de suministro mediante captaciones de agua subterránea, así como realizar nuevos trazados de tuberías para su incorporación a las redes de distribución general.
Las tres obras se encuentran en fase de estudio técnico, para garantizar las perforaciones especializadas y el suministro de largos tramos de tubería de fundición.
