Las movilizaciones de parte de los empleados del sector del metal pasa factura ya al astillero de Navantia en Cádiz. Según fuentes sindicales, la planta se queda sin carga de trabajo civil hasta octubre.
Las protestas iniciadas el viernes pasado y recrudecidas el domingo, cuando los manifestantes reventaron el mitin de la candidata a la Presidencia del Gobierno, Yolanda Díaz, el domingo, y los cortes de tráficos puntuales llevado a cabo el lunes generaron cierta inquietud en el sector. La convocatoria de huelga indefinida por la Coordinadora de Trabajadores del Metal (CTM) a partir del próximo lunes ha llevado la incertidumbre hasta el punto, según las mismas fuentes, de que hay armadores que han decidido acortar su estancia en la factoría o suspender la faena comprometida.
El sábado, el buque Donald M. James partirá del dique, rumbo a un astillero turco, pese a que inicialmente tenía programados trabajos hasta el 31 de julio. El Speak Bahrain “quiere irse lo antes posible”, aunque los trabajos finalizaban el día 21.
Además, queda en suspenso la puesta a punto del Speak Catalunya. Que iban a comenzar el día 24 y se prolongarían hasta el 5 de septiembre, y “hay muchas posibilidades de perderlo”.
Excepto las dos fragatas, no habrá nuevos encargos hasta octubre, con el crucero Carnival Freedom.