Una semana después de su partida hacia la Aldea del Rocío en Almonte, la Hermandad de Sanlúcar hizo su entrada en la playa de Bajo de Guía donde una multitud de fieles acudieron a recibir al Simpecado de la Hermandad y a los romeros que este año han realizado el camino para acudir al encuentro de la Blanca Paloma.
Pese al cansancio, el recibimiento en Sanlúcar animó a la comitiva, que realizó su recorrido de vuelta hasta la Iglesia de San Jorge. Centenares de sanluqueños acudieron al encuentro de la Hermandad con la emoción contenida, pues muchos de ellos, como consecuencia de la crisis, no habían podido acompañar este año a la Virgen. Los vítores y cánticos se mezclaron con los pitos rocieros, que iban anunciando el regreso de la Hermandad de un camino que este año ha sido especialmente significativo para Pepi Pérez, la primera mujer al frente de la Hermandad de Sanlúcar que realizaba su primer camino como Hermana Mayor y que se mostró muy emocionada ya en el interior de San Jorge.
Además, el camino de este año ha estado marcado por la ausencia de incidencias, sólo un joven de la Hermandad tuvo que ser atendido al fracturarse la muñeca en el camino de ida.
El Simpecado de la Hermandad de Sanlúcar, fue presentándose a su regreso del Rocío ante las Iglesias de San Nicolás, San Francisco, Santo Domingo y también la junta de gobierno de la Hermandad tuvo a bien compartir unos minutos con las Hermanas de la Cruz, que acudieron a recibir al Simpecado a la puerta de su sede. El párroco de San Nicolás, Antonio jesús Jaén Rojas, acompañado por el director espiritual de la Hermandad, Ángel Pérez del Yelmo, rezaron a la Virgen del Rocío a su paso por los templos sanluqueños, dando gracias por el camino realizado.
