Según la investigadora María Teresa López Arandia, las primeras noticias de las aguas termales de Jabalcuz se remontan a un acta capitular fechada el 13 de julio de 1594, en la que el cabildo municipal solicita sea estudiado el proyecto para la construcción de unos baños. Desde entonces, las termas han sido utilizadas a lo largo de la historia de la ciudad. Incluso, grandes personalidades de todo el país acuden a bañarse en sus aguas, pero a partir de la década de los setenta el balneario entra en desuso, hasta su posterior abandono ya en los ochenta. En 1982, los herederos de la marquesa de Blanco-Hermoso lo venden a una empresa promotora. El paraje de Jabalcuz comienza a deteriorarse y finalmente las urbanizaciones emergentes en los años noventa y terminan por cambiar para siempre uno de los lugares preferidos para el recreo de los jienenses, sobre todo los jardines. Acutalmente las termas están completamente abandonadas y a la espera de ser recuperadas para el turismo. En julio de 2009 el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía acordó inscribir en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz como Bien de Interés Cultural, con la tipología de Sitio Histórico, el Balneario y Jardines de Jabalcuz.
En 2007, la Consejería de Cultura, vende a CajaGranada, por un millón de euros, las tres fincas en las que se alza el balneario, con una superficie total de 36.634 metros cuadrados. El suelo está clasificado como urbano y por una de las tres fincas pasa la cañada real conocida como Cordel de Jabalcuz. La intención es cederlo al Ayuntamiento para rehabilitar y abrirlo de nuevo al público, pero el proyecto, durante el anterior mandato de PSOE e IU, se queda en el tintero. A pesar de estar declarado como BIC, el estado del balneario es de total abandono, tal como puede observarse en el reportaje gráfico. Las asociaciones de vecinos de Jabalcuz continúan luchando para que vuelva a ponerse en valor y abrirse al público y revitalizar una de las zonas turísticas con más posibilidades de la capital.
Qué pasa con los monumentos BIC
El Defensor del Pueblo Andaluz ha iniciado una queja de oficio solicitando información a la Consejería de Cultura y Deporte sobre las actuaciones de protección llevadas a cabo en el patrimonio histórico de la comunidad andaluza declarado Bien de Interés Cultural (BIC), sobre el que detecta "importantes carencias".
En la capital señala un casco antiguo y conjunto histórico con “edificios abandonados”; lamenta el estado del cementerio de San Eufrasio, de 1829, clausurado por su estado de ruina, al igual que los restos de la Iglesia de San Miguel o a la Casa Mudéjar de la Virgen, en el barrio de San Juan. La misma suerte corre el barrio de la judería, a pesar de formar parte del Gran Itinerario Cultural Europeo de Patrimonio Judío, y el balneario urbano los y jardines de Jabalcuz, baños del siglo XVII cedidos al Ayuntamiento.
