La Autoridad Portuaria de Motril (Granada) ha querido aclarar este jueves que considera "impecable" el trabajo que desarrollan los agentes de la Guardia Civil en el recinto, ya que "llevan a afecto" las instrucciones que emanan del Administrador de Aduanas, al que ha reclamado "uniformidad de criterios" respecto a otros enclaves.
Concretamente, la Autoridad Portuaria ha pedido a los gestores de la Aduana que expliquen si los criterios que se aplican en Motril, a la hora de rechazar un vehículo o una furgoneta, son los mismos que en el resto de puertos, especialmente en Almería, Málaga o Algeciras, "de forma que la decisión no dependa de las personas que participan en la operativa de embarque y sí de unas órdenes de servicio comunes a todos los recintos".
En este punto pone como ejemplo el caso de varias furgonetas que no han podido embarcar en Motril y sí a través de puertos limítrofes.
El Puerto insiste en un comunicado en el "tratamiento discriminatorio" y pide "uniformidad de criterios" para que no se vean perjudicadas las conexiones marítimas de Motril con las ciudades de Melilla, Nador y Alhucemas, de las que, según añade, dependen muchas economías de la costa y la provincia de Granada, al tiempo que vuelve a reiterar el reconocimiento a los agentes de la Guardia Civil que prestan servicio en el recinto y "que con su trabajo han contribuido al desarrollo del mismo en los últimos años".
Estas declaraciones se producen después de que haya trascendido un escrito del Puerto remitido a la Subdelegación del Gobierno, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que indica que en las últimas semanas se ha producido una "modificación sustancial de las condiciones de acceso de los vehículos", lo que ha provocado que se estén rechazando un gran número de vehículos por parte de la sección fiscal de la Guardia Civil "impidiéndoles el embarque", lo que ha generado el descontento de la Naviera Armas, que "ve perjudicada su competencia".
Desde la Autoridad Portuaria señalaban en el documento que esto pone "en grave riesgo" la continuidad de las líneas marítimas con Melilla y Nador y reclamaban que se "den las instrucciones necesarias para corregir los hechos acontecidos".
Este escrito fue criticado desde la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC), que defendió la labor que realizan los agentes destinados en el control fiscal de mercancías de turismos, furgonetas y autocares que embarcan en el Puerto, censurando que se "intente que hagan la vista gorda en materia de aduanas".
