El tiempo en: Puente Genil
Publicidad Ai

sociedad

La reforma supera el debate de totalidad con los votos de PP, UPN y Unió y la oposición del resto

El PP tilda las enmiendas de "chapuza" y saca adelante la iniciativa a la que los grupos irán presentando enmiendas parciales

Publicidad Ai
Publicidad Ai

La reforma puntual del aborto diseñada por el PP ha superado este jueves el primer escollo en el Congreso, donde las enmiendas de totalidad presentadas por PSOE, Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), ERC y BNG han sido rechazadas con los votos de UPN, Unió y el Grupo Popular. La bancada 'popular' ha votado en bloque para rechazar las enmiendas de la oposición, pese a contar entre sus filas con al menos cinco diputados disconformes con la iniciativa en los términos en que ha sido planteada.

   La modificación planteada por el Grupo Popular impondrá el consentimiento paterno a las chicas de 16 y 17 años. Mientras, las enmiendas de totalidad que han suscitado más respaldo han sido las planteadas por el PSOE y por el BNG, que proponían dejar la ley como está en lo que a regulación del aborto se refiere y avanzar en materia de salud sexual y reproductiva, educación y prevención de embarazos no deseados. En ambos casos, se han alineado todas las formaciones de izquierda del Congreso, con un resultado de 120 votos a favor, 185 en contra y 10 abstenciones, las de UPyD, cuatro diputados de Convergencia --cinco la han respaldado-- y Coalición Canaria.

   Los textos de sustitución que habían registrado Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) y ERC, que sí planteaban cambios de calado en la ley como incorporar en el titulo primero el reconocimiento expreso del derecho al aborto o ampliar a 22 semanas el plazo para interrumpir libremente el embarazo, han recabado menos apoyos: 16 votos favorables frente a 190 en contra y 109 abstenciones, en su mayoría en la bancada del Grupo Socialista.

   Los diputados 'díscolos' del PP han votado contra las cuatro enmiendas porque en todos los casos se trataba de reforzar la ley actual o ampliarla, así que su abstención o su voto favorable "podría haberse interpretado" como un respaldo al sistema de plazos, cuando precisamente el origen de su descontento con el Grupo Popular está en que su reforma ni vuelve al sistema de supuestos ni elimina el derecho al aborto, según han informado fuentes parlamentarias a Europa Press.

   UPN se ha sumado a esta posición porque, en palabras de su portavoz, Carlos Salvador, "defender al más indefenso, el no nacido, es lo más progresista que se puede hacer" y no podía no tomar partido contra enmiendas que a su juicio, iban en contra de esta premisa. También en conciencia han votado los diputados de Uniò Democrática de Cataluña (CiU se divide ante estas cuestiones, Convergencia da libertad de voto y Uniò no), que ya durante la tramitación de la ley defendieron sin éxito que se impusiera el consentimiento paterno a las menores, como ha recordado la portavoz, Conchita Tarruella.

   En cuanto al PNV, el portavoz de Igualdad, Joseba Aguirretxea, ha explicado que su grupo no ha presentado ninguna enmienda de totalidad porque al tratarse de una proposición de Ley Orgánica, es obligatorio ofrecer un texto alternativo y para los 'peneuvistas' el mejor texto es el de la legislación actual. Con el mismo razonamiento, no podía votar a favor de ninguna de las cuatro enmiendas propuestas por los otros grupos, aunque finalmente ha apoyado la del PSOE. "La desaparición de los dos puntos de modificación que presenta el PP es lo que llevaremos en las enmiendas parciales: serán de supresión", ha avanzado.

   Por su parte, el portavoz de UPyD, Carlos Martínez Gorriarán, ha esgrimido un argumento similar para exponer la abstención de su grupo, que "rechaza de plano" lo que tacha de "maniobra filibustera del PP" y no vota las enmiendas porque si quisiera una modificación de la ley, habría presentado su propio texto de sustitución. "Nosotros lo que queremos es una mejora de la ley desde el mayor consenso político y social (...) mientras no se acabe de entender que en una democracia progresista lo que se debe hacer es avanzar en libertad y seguridad jurídica, no apoyaremos en ningún caso la propuesta del PP", ha señalado.

EL PP TILDA LAS ENMIENDAS DE "CHAPUZA"

   La portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Marta González, ha tachado la enmienda del PSOE de "chapuza jurídica" y las de ERC e Izquierda Plural de "absoluto disparate" y ha insistido en que la reforma que se plantea obedece al compromiso del PP con la sociedad, que no está de acuerdo con la regulación actual del aborto en las menores de edad, y a la necesidad de devolver a los padres y tutores la potestad sobre sus hijas que, en su opinión, la ley de plazos les arrebató, al "sustituir la función de los progenitores por la función del Estado".

   Asimismo, ha recordado que, según las clínicas, las menores que abortan sin conocimiento de sus padres son el 0,4 por ciento del total, para llamar a los grupos a legislar para la mayoría y no para la excepción. "Si ustedes mismos han utilizado en su argumentación una y otra vez el hecho de que la mayoría abortan con el conocimiento de sus progenitores, que las acompañan en el proceso (...) ¿Por qué no quieren que se legisle en función del 99,3% restante de las menores? ¿Por qué no permiten que esos casos excepcionales se rijan por las normas que nuestro Código Civil contempla?", ha planteado.

   Para la portavoz de Igualdad en el PSOE, Carmen Montón, "cuatro enmiendas a la totalidad son muchas voluntades en contra de esta reforma" y deberían bastar para que el PP se plantease retirarla, ya que "tienen mayoría absoluta pero no tienen mayoría social", como a su juicio demuestra que el primer intento de modificación de la ley fuera retirado y costara el puesto al ministro Alberto Ruíz-Gallardón. Opina que es "cebo electoralista que el PP blande sin pudor ante cada convocatoria" y que llega con la Legislatura casi acabada para que entre en vigor en precampaña: "política de tierra quemada".

   La enmienda que había presentado el PSOE reivindicaba la legislación actual y el desarrollo de su parte primera, la destinada a Salud Sexual y Reproductiva, que es a su juicio lo que debería estar haciendo el Gobierno en lugar de "castigar" y "criminalizar" a las más jóvenes abocándolas, según ha dicho, a un aborto peligroso para su vida y su integridad, o a una gestación no deseada que "tendrá consecuencias para toda la vida", mientras "no disminuirán las tasas" de embarazos involuntarios y "aumentarán los riesgos".

   En la misma línea iba la del BNG, cuya portavoz, Olaia Fernández Dávila ha incidido en que "la ley no está lo suficientemente desarrollada" en ese ámbito y ha defendido que no es necesario tocarla en lo demás, habida cuenta de que "las cautelas" para el aborto en menores de 16 y 17 años están ya recogidas en el propio texto. "No podemos entender que desde la seriedad y la reponsabilidad se puda hacer una propuesta como esta que dejaría a muchas jóvenes sin la seguridad necesaria. El PP opta por salvar electoralmente su partido, aunque no creo que sea posible", ha apuntado.

   La portavoz y también proponente de enmienda de totalidad en Izquierda Plural, Ascensión De las Heras, ha incidido durante su intervención en que el PP "se empeña en socavar y cercenar derechos" con "medidas ideológicas y electoralistas que ponen en peligro la vida y la salud de las mujeres más jóvenes y más vulnerables", cuando "no son nadie para legislar en el útero de las mujeres".

   En la misma línea, Teresa Jordà i Roura, de ERC, ha denunciado que con la modificación el PP "pretende robar el derecho de las jóvenes de 16 y 17 a decidir de su maternidad" y "encima, con la caradura de hablar de protección del menor". "La mejor protección es que la maternidad sea voluntaria y no impuesta", ha asegurado.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN