Miles de personas han demostrado hoy en las calles de Sevilla que las sevillanas tienen una salud a prueba de bomba, y lo han hecho en grupos, en pareja, en ropa de calle o ataviadas con trajes de flamenco y faralaes, recorriendo las calles bailando en una mañana casi veraniega.
Han sido tres intensas horas que han superado las previsiones más optimistas de la organización del encuentro 'Yo, por sevillanas',una idea sacada adelante con el fin de reivindicar la importancia de las sevillanas en el mundo de la cultura en España, en la que han participado desde personas anónimas a algunos de los intérpretes y grupos más famosos en relación con este estilo musical.
Las Carlotas, Amigos de Gines, María de la Colina, Manuel Durán, Cantores de Híspalis o Melhaza son algunos de los que día a día tienen a las sevillanas como parte de su repertorio.
Hoy se han citado en torno a los sevillanos y visitantes para cantar y bailar en sus calles, en la primera manifestación popular por sevillanas que se ha organizado, y que, visto su éxito, puede tener una segunda edición muy pronto.
El objetivo, como ha explicado la cantante y productora Lola Triana, es "poner en valor la identidad cultural de las sevillanas", así como la importancia que tienen en la cultura y la música españolas, todo ello con una perfecta organización, que se ha materializado desde las once de la mañana con el inicio de los primeros recorridos.
Antes de esa hora, ya se concentraban las primeras personas dispuestas a bailar sevillanas en los tres puntos de salida, ubicados en Puerta de Jerez, Alameda de Hércules y Plaza del Altozano, y desde allí se ha iniciado un recorrido de unas dos horas de duración que ha desembocado en la Plaza de San Francisco.
El recorrido que se inició en la Alameda de Hércules (Casa de las Sirenas), recorrió las calles Trajano, Duque de la Victoria y Sierpes; el de Plaza del Altozano, Puente de Triana, Reyes Católicos, San Pablo, Rioja, Tetuán y Tarifa, y el de Prado de San Sebastián (Universidad), San Fernando, Puerta de Jerez y Avenida de la Constitución.
Con todo, la actividad ha respondido a lo que su principal promotor, el cantante y compositor Enrique Casellas, pretendía, que no era otra cosa que realizar "una gran quedada por sevillanas", abierta tanto a profesionales como a personas de la calle que quisieran reivindicar este arte y a la vez bailar por las calles.
Casellas se inspiró para ello en una actividad desarrollada en las mismas calles sevillanas días atrás, con siete pianos distribuidos en sus calles para que cualquier persona los pudiese tocar libremente, con lo que pensó en desarrollar una idea para que la cultura, esta vez en forma de sevillanas, también tomase las calles hispalenses.
Pero, seguramente, el autor de la idea no esperaba la enorme repercusión que la iniciativa ha tenido, poniendo de manifiesto que las sevillanas no son un género que corra peligro, y que es más que una simple excusa para que determinados grupos y solistas saquen sus discos cuando va llegando la primavera o se acerca una fecha concreta para ello.
El fin de fiesta ha servido para unir a los participantes en la Plaza de San Francisco y disfrutar de las sevillanas más clásicas gracias a la Banda de Música de la Cruz Roja, así como para escuchar un manifiesto que ha resumido el espíritu de una jornada que ha sido tendencia nacional en las redes sociales, y supone un antes y un después a la hora de valorar el estilo musical folclórico más diverso del territorio español.
