En esta sesión estaba previsto que intervinieran, entre otros, el maestro del toreo colombiano César Rincón, el escritor y aficionado colombiano Darío Jaramillo, así como el escritor y poeta Juan José Téllez y el escritor y crítico taurino del diario El Mundo Javier Villán Zapatero.
Finalmente Rincón se cayó del cartel y en su lugar se desplazó desde Colombia el joven maestro colombiano Luis Bolívar.
La carpa registró menos entrada de público que en la jornada inaugural, debido a que algún ponente vino posiblemente a hacer caja, sin tener conocimiento de qué trataba el asunto.
Esto demuestra una vez más que las jornadas están perdiendo interés debido a su decadencia organizativa, habiéndose convertido en un cocidito político-cultural-periodístico interesado.
Tampoco asistieron el alcalde, Tomás Herrera, ni la concejal delegada de Cultura y de Feria y Fiesta Inmaculada Nieto, pero sí el concejal delegado de Patrimonio, Gabriel Orihuela.
El moderador, lanzó la primera pregunta acerca de Colombia y los toros, interviniendo en primer lugar Darío Jaramillo apuntando que “vengo de la literatura y de la poesía. Y si la poesía es una religión la tauromaquia también. Por lo tanto el toreo es algo más que un espectáculo”.
Intervención periodistas
Posteriormente Juan José Téllez, sorprendentemente nuevo aficionado taurino según consta en el programa, estuvo listo y avispado para que no le cogiera el carrito de los helados, porque se preparó el tema y disertó brevemente del mundo del toro de México, Colombia y Venezuela.
A continuación le tocó el turno al crítico taurino de El Mundo Javier Villán Zapatero el que de entrada dijo que “yo no sé nada del toreo de Colombia”. Tras citar muy brevemente una crónica que le hizo al torero Luis Bolívar, prosiguió apuntando que “mi conocimiento del toreo colombiano es básicamente en España, con César Rincón”.
Esta criatura del periodismo taurino tuvo poca sensibilidad y profesionalidad con el diestro Luis Bolivar, porque se explayó sobre los triunfos y trayectoria del maestro César Rincón, promocionándose ególatramente hablando de sus libros escritos acerca de Rincón. Después finalizó su primera intervención diciendo algo así como “no sé si he agotado el tiempo, pero en el segundo turno continuaré hablando sobre Rincón”.
Bolivar, nuevo referente del toreo colombiano, quien se presentó en la carpa junto a su apoderado Luis Álvarez, cerró esta primera ronda de intervenciones señalando que “estoy recién llegado de Colombia y cuando termine la jornada me marcho de nuevo para allí. Hablaré como aficionado porque cuando vi de niño al maestro César Rincón surgió mi sueño de ser torero”.
El diestro colombiano prosiguió asegurando que “tuve la suerte de ver la transición del toreo colombiano y he tenido la suerte de participar en esa transición. El toro y la vida de Dios me han recompensado. Porque el ser torero es algo muy bonito”. Bolivar estuvo en torero profundo, sereno y templado. Y tras finalizar su intervención me ausenté, para evitar la segunda intervención de los otros ponentes especialmente la de Villán Zapatero.
