El portavoz del grupo socialista, Fran González, describió su balance anual como “oportunidad desaprovechada y frustración”. Los socialistas consideraban que el Gobierno “tenía muchos más proyectos, buscando la complicidad de la oposición, pero estamos en la misma situación. Todo parece una confrontación”.
Se sienten frustrados porque “las propuestas que traemos no se desarrollan. Si tenemos un deseo es que arranque este equipo de Gobierno y que aprovechen las oportunidades, por ejemplo, con otras administraciones”, para lo que nombró el proyecto de Valcárcel.
El socialista manifestó que su estrategia “es intentar contribuir y aportar al Gobierno local. Estamos en la oposición y la ejercemos: para lo positivo, como es el bono social o las modificaciones presupuestarias, pero no vamos a dar un cheque en blanco”. Desde un Ayuntamiento se puede hacer “muchísimo más en políticas sociales, en vivienda y en empleo, con medidas que hemos puesto sobre la mesa”.
Como autocrítica, matizó que se enfrenta a una situación “difícil. Tenemos que seguir explicando nuestro papel de oposición. Que se nos visualice como partido que apuesta por la ciudad, y posibilitemos que se espabile el Gobierno local”.
