Un agente de la Policía Nacional ha resultado herido en el rescate de un anciano de 88 años, que permanecía suspendido en la cornisa de un edificio de nueva plantas de la Ronda del Tamarguillo mientras un guardia de seguridad de un centro comercial cercano intentaba evitar que se precipitara al vacío. El anciano, que había salido a pasear de madrugada, se encontraba desorientado, en pijama y descalzo, fue trasladado al hospital Virgen del Rocío.
Según el parte de actuación de la Policía Nacional, una patrulla que presta sus servicios en el Distrito Sur de Sevilla fue requerida a las 7:45 de este domingo ante lo que parecía ser el intento de un hombre de saltar desde una cornisa. Personados en el lugar, el número 25 de la Ronda Tamarguillo, y tras una segunda batida, localizan a una bombero a los pies del edificio y a un individio "que sujeta a una persona que se encuentra suspendida de la cornisa de la última planta", la novena.
Uno de los agentes de la Policía Nacional accede a la azotea, que se encuentra abierta, y localiza a un vigilante de seguridad que sostiene por una mano a un hombre de avanzada edad, saltando el agente hasta la cornisa para auxiliarlo, perdiendo el equilibrio ante la inclinación de la misma, "consiguiendo sujetarlo por l cintura evitando que el mismo se precipitara al vacío".
El anciano, natural de Marchena pero residente en la misma Ronda Tamarguillo, se encuentra "aturdido y desorientado, sin apenas fuerzas", relatando que había salido a pasear y que se ha desorientado, que ha terminado en la cornisa y que cuando se ha dado cuenta de donde estaba, "no podía subir". El anciano, que estaba en pijama y descalzo, con síntomas de principio de hipotermia, aseguró que llevaba en la cornisa desde las tres de la mañana.
Por su parte, el vigilante de seguridad ha relatado que fue alertado sobre las 07:50 por el personal de una gasolinera cercana de la presencia de un individuo en la cornisa de la novena planta del edificio, por lo que accedió a la azote y estuvo sujetándolo del brazo para evitar que se precipitara al vacío hasta que llegaron los agentes.
La mujer del anciano relató que se había percatado de su ausencia sobre las seis de la mañana pero supuso que había ido a pasear, ya que nunca le había ocurrido nada parecido, apuntando que sí que tenía prescritas "gran cantidad de medicamentos por dolencias varias".
El anciano, tras facilitarle su mujer ropa de vestir, fue trasladado junto a ésta al hospital Virgen del Rocío, mientras el agente de la Policía Nacional ha presentado parte al lesionarse al saltar a la cornisa para auxiliar al hombre. Según han informado fuentes cercanas a la familia, el hombre sufre episodios esporádicos de demencia.
