37 años de una gesta de nivel mundial en la plaza del Arenal

Tal día como este viernes 25, pero hace treinta y siete años, un gaditano triunfaba en la plaza del Arenal de Jerez. Rafael González batía el récord mundial de permanencia en bicicleta ya que estuvo 75 horas y cuatro minutos pedaleando sin cesar alrededor de la fuente de la jerezana plaza. Un récord mundial que, posteriormente, fue homologado por la Federación Española de Ciclismo, a propuesta de la Provincial que presidía el jerezano José Mariano Sánchez Martínez. El apoyo logístico de la Cruz Roja fue fundamental para que Rafael, veterano ciclista ya entonces, consiguiese tamaña gesta que fue seguida, desde el primer día, por cientos de jerezanos que no dejaron solos en ningún momento, ni durante los días ni durante las noches, a este enamorado de la bicicleta y que firmó una gesta que quedó para los anales del ciclismo no solo jerezano, sino regional y nacional.
En ese año 1982 comenzó la construcción del Circuito de Jerez, el día 26 de junio se declaró al casco antiguo conjunto histórico artístico lo que conllevó a que  se elaborase un Plan Especial de Reforma Interior del Casco Antiguo (PERI) como urgente necesidad de frenar las actuaciones en el casco antiguo, dado que no se tenían en cuenta los valores patrimoniales. Se trataba de recuperar el casco histórico de la ciudad como Patrimonio Colectivo, controlar el desplazamiento y especulación, rehabilitar edificios antiguos, conservar la arquitectura popular, recuperar lienzos y torreones de la muralla, así como respetar el tejido urbano.Se extendí la huelga de viticultores, se abrió la Facultad de Derecho, en la Feria del Caballo hubo cuatro corridas de todos con matadores como Curro Romero, Manolo Vázquez, Rafael de Paula, Paquirri o el rejoneador Manuel Vidrié , se cerró el Museo Arqueológico y nació El Canijo de Jerez. En ese mismo año solo existía en Jerez el periódico La Voz del Sur y Pedro Pacheco era alcalde en su primera legislatura como tal.
Era otro Jerez aquel en el que Rafael González declaraba a Antonio Arias, en La Voz del Sur, que “el pueblo de Jerez ha sido mi pedal derecho durante toda la prueba. El aliento y el apoyo que en todo momento me han prestado han sido los auténticos pedales de mi bicicleta”. En lo económico reconocía que “lo que he cobrado han sido 125 mil pesetas del Patronato Municipal de Deportes de Jerez. No he venido a ganar dinero, sino a hacer deporte”, declaraba.
Comentaba que había tenido una gran ayuda de varias firmas comerciales “en el aspecto de que no me ha faltado el alimento y otras necesidades durante los días de la prueba, pero nada más. Hubo alguno que me prometieron algunos “regalitos” si conseguía el récord pero cuando finalicé la prueba no han aparecido”. Cruz Roja, Policía Nacional y Municipal, Patronato Municipal de Deportes, Federación Gaditana de Ciclismo y Agrupación Ciclista Xerez colaboraron al máximo.