El tiempo en: Puente Genil
Publicidad Ai

sociedad

Cómo elegir una silla escritorio cómoda

La comodidad de una silla de escritorio es fundamental a la hora de trabajar y de estudiar, ya sea desde casa o presencialmente

Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
  • Silla.

La comodidad de una silla de escritorio es fundamental a la hora de trabajar y de estudiar, ya sea desde casa o presencialmente. Su importancia radica tanto en la salud de los usuarios como en su productividad. Es complicado rendir al cien por cien si las muchas horas que pasamos sentados en esas sillas nos provocan una constante incomodidad. El mercado ofrece muchas opciones y siempre hay que elegir la que mejor se adapte a nuestras necesidades. Puedes ver algunos modelos aquí.

Factores a tener en cuenta al adquirir una silla de escritorio

Antes de adquirir alguno de los modelos de sillas de escritorio fijarte en una serie de aspectos, que podríamos resumir en tres; el tipo de espacio en el que la vas a utilizar, la frecuencia y la intensidad de su uso, y su durabilidad.

Tipo de espacio

No es lo mismo adquirir una silla de escritorio para la sala de espera que para zonas de puestos operativos.

El diseño de las sillas y sus mecanismos serán diferentes dependiendo de las funciones del área en la que se instalen.

Intensidad y frecuencia de uso

Este factor vendrá muchas veces muy influido por el punto anterior, ya que la función de la silla determina la cantidad de tiempo que se va a utilizar.

Una silla operativa siempre se utiliza más que una silla de formación, que a su vez será utilizada por diferentes personas y deberá estar diseñada para un movimiento más frecuente.

Durabilidad de la silla

Lo ideal es que las sillas tengan una duración máxima, pero en eso influye notablemente el material con el que esté fabricada y sus materiales.

Aspectos básicos de las sillas de oficina

Es fundamental que una silla de escritorio sea ergonómica y que se adapte a la perfección al cuerpo del usuario, garantizando un equilibrado reparto del peso.

A continuación te mostramos las características con las que debe contar una buena silla de oficina.

Asiento regulable en altura y profundidad

Los asientos regulables en altura permiten adaptar el respaldo de la silla a la espalda, mientras que los regulables en profundidad dejan un espacio libre entre la parte posterior de las rodillas y el borde del asiento, con la finalidad de evitar la presión y favorecer la circulación de la sangre, particularmente la del retorno venoso.

Respaldo reclinable y posición de balanceo

Es muy beneficioso que el respaldo se pueda regular en distintos puntos de inclinación, así como que pueda dejarse en una posición libre que permita un balanceo durante los descansos o las pausas.

Si el balanceo es posible en el modelo de silla de escritorio elegido, debería contar con un regulador para poder ajustar la tensión al peso del usuario. A menor peso, menos tensión, y viceversa.

Sistema sincro

El mecanismo o sistema sincro permite que el respaldo se incline hacia atrás de una manera sincronizada con el movimiento de la base para que el cuerpo pueda moverse en sintonía.

Diseño adaptable a las formas del cuerpo

Para poder mantener la zona lumbar protegida y la columna alineada, es aconsejable que el respaldo disponga de una prominencia lumbar, de modo que permita que el cuerpo se apoye en un apoyo estable y que la espalda se mantenga en una posición natural. Deberá disponer de un regulador de profundidad y altura de la prominencia.

La parte delantera del asiento debe contar con una ligera inclinación para favorecer la circulación de la sangre y mitigar la presión en las piernas.

Los asientos con una dureza entre media y alta son preferibles a los que presentan unos asientos excesivamente blandos.

Materiales que favorezcan la transpiración

Uno de los factores que pueden provocar una mayor incomodidad en una silla de escritorio es una mala transpiración. Por este motivo es recomendable que esté construida con materiales transpirables, de estilo malla o similar.

Antiestática

Las sillas de escritorio deberían estar construidas con materiales antiestéticos, disipadores de la electricidad estática. Este tipo de sillas deben contar con un marcador ESD (de descarga electrostática).

Hay que prestar mucha atención a las ruedas de la silla para la disipación de la electricidad estática, ya que en muchos casos hay que adquirirlas como un extra por no venir de serie.

Cómo sentarse en una silla de escritorio

Sentarse en una mesa de trabajo frente al ordenador en una mala postura puede generar en muy poco tiempo serias molestias y problemas de salud.

Un trabajador puede pasar fácilmente entre 8 y 9 horas al día sentado en su silla de escritorio. Para evitar molestias y dolores musculares es conveniente que sigas estos consejos:

  • Cuello: mantener la mirada al frente sin doblar el cuello.

  • Hombros: relajados.

  • Codos: apoyados y pegados al cuerpo en un ángulo de 90 º o 100 º.

  • Brazos: no los tengas en suspensión cuando escribas.

  • Antebrazos: apoyados sobre el escritorio.

  • Muñecas: relajadas y alineadas con los antebrazos.

  • Espalda: apoyada en el respaldo con su curvatura natural.

  • Cadera: en un ángulo de 90 º y con tus muslos paralelos al suelo.

  • Rodillas: en un ángulo mayor a 90 º.

  • Pies: apoyados por completo en el suelo.

  • Vista: intenta relajarte cada cierto tiempo mirando a un punto lejano.

 La calidad de una silla de escritorio es fundamental para tu salud y productividad, tanto si la utilizas para trabajar como para estudiar, pero de nada servirá si tu postura sobre ella no es la adecuada.

 

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN