A través del sistema de farmacovigilancia humana (SEFV-H) de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), Sanidad está estudiando en total 150 casos de sospechas de reacciones adversas entre el millón de personas que ya se han vacunado contra el nuevo virus.
Entre estas sospechas, además de la muerte del feto, se encuentran tres reacciones alérgicas, dos casos de parálisis facial y tres de convulsiones.
Todos estos casos han requerido un especial seguimiento desde el punto de vista clínico.
Sanidad ha resaltado que la información notificada por Aemps, y registrada en su base de datos Fedra, no debe considerarse “como prueba de que el medicamento sea la causa del acontecimiento que describe”.
“Esta información debe interpretarse dentro de un contexto más global y con el asesoramiento de personas expertas en su manejo”, añade el comunicado del Ministerio de Sanidad.
Los datos dados a conocer ayer por el departamento que dirige Trinidad Jiménez corresponden al periodo desde el 16 de noviembre, fecha de comienzo en todas las comunidades autónomas de la vacunación para los grupos de riesgo determinados, hasta el 29 de noviembre.
Sanidad ha destacado que la gran mayoría de las 150 sospechas de reacciones adversas se encuentran “dentro de lo esperado”, según la información contenida en las fichas técnicas de las vacunas: cansancio y malestar general, reacciones en la zona de inyección, fiebre o febrícula, dolores musculares y articulares, mareos y cefaleas.