Hablamos mucho de los dolores de espalda tan frecuentes por uso de ordenador o ratón. Hay otros que quizás no los tenemos tan en cuenta, pero resulta que 8 de cada 10 conductores sufren dolores de espalda mientras conducen. Los atascos además aumentan el tiempo al volante y la posibilidad de que aparezcan. Esa mala posición favorece los dolores de cuello y de espalda o pueden empeorar un lumbago, hernias de disco o ciática. Ese dolor de espalda al volante lo podemos mejorar siguiendo estas recomendaciones: coloca el cuerpo en una posición lo más centrada y vertical posible con la espalda pegada al asiento, el asiento debe estar ligeramente inclinado hacia atrás, entre 15 y 25 grados, para que se puedan extender cómodamente los brazos, las piernas han de estar semiflexionadas, asegurando una distancia entre nuestras rodillas y el salpicadero, la nuca debe estar cerca del reposacabezas y en posición recta para ver bien la carretera, el cinturón de seguridad ajustado al cuerpo para evitar el efecto submarino (cuando te deslizas por debajo del cinturón), para salir del vehículo gira el cuerpo 45º, coloca las rodillas hacia el exterior y coge impulso con las piernas al levantarte. Para saber la distancia correcta hasta el volante, coloca la espalda recta pegada al asiento, si puedes apoyar las muñecas en la parte superior del volante, la distancia es la correcta.
En viajes largos descansa cada 2 horas unos 15 minutos, caminando, estirando las piernas y la parte superior de la espalda. Puedes colocar un cojín o un jersey para mantener la zona lumbar pegada al asiento. Los asientos con calefacción ayudan a mejorar los dolores de espalda. Haz ejercicio físico porque el fortalecimiento de la musculatura de la espalda disminuye sus dolores.
Los espejos retrovisores son importantes y deben tener un ángulo de visión amplio de la carretera, colocados de tal forma que solo tengas que mover los ojos para mirarlos. El reposacabezas debe estar a una altura que la parte superior quede a la altura de los ojos.
También es importante regular la altura del asiento de manera que la cadera debe estar por debajo de las rodillas. Orden en el interior del vehículo para evitar distracciones por caídas o movimientos de objetos. No me olvido del temido equipaje en el maletero, a la hora de introducirlo se debe hacer con una pierna adelantada para repartir mejor el peso.
Muchas veces es verdad que adoptamos malas posturas al volante o tenemos ciertos vicios posturales al conducir, pero si logramos corregirlos mejoraremos algunos de esos dolores de espalda que no sabíamos por qué pasaban. No es necesario algunas veces un esfuerzo para producir dolor en la espalda y la prevención, será nuestro mejor aliado contra cualquier enfermedad.