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Heraldos de una Pasión que Jerez empieza a hacer suya

La Paz de Fátima y Humildad y Paciencia empiezan a escribir la Pasión según Jerez

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  • El Señor de la Paz, abandonando la parroquia de Fátima. -
La Paz, desde Fátima, y Humildad y Paciencia, desde San Dionisio, ofrecieron ayer dos formas bien distintas de entender la Pasión en una tarde noche de contrastes que constituyó el mejor introito posible al Domingo de Ramos. La Semana Santa 2010 empezó a escribirse a eso de las seis de la tarde entre la barriada de la Constancia y la plaza España. Fue entonces cuando inició su itinerario la Hermandad de la Paz, que ofreció sobradas muestras de estar ya más que preparada para presentarse en la Carrera Oficial.

De entrada, destacable es el hecho de que fueran algo más de doscientos los hermanos que vistieran la túnica nazarena, en un cortejo que este año ha estrenado 35 nuevas túnicas. El único paso de la cofradía presentó como novedad la talla de la trasera del canasto. A partir de ahora, la idea de la hermandad es tratar de compatibilizar en lo posible la culminación de estas andas con el estreno del paso de palio de la Virgen del Refugio. El objetivo es que la titular mariana esté ya en la calle el próximo año. A ello va a contribuir la ayuda de la sevillana Hermandad de San Bernardo, que está dispuesta a ceder su antigua candelería.

La Agrupación Musical Virgen de Valme, de Dos Hermanas, fue la encargada de acompasar el caminar de los 75 costaleros que integraron la cuadrilla comandada por Jesús Caro.

De la luminosidad y la algarabía propia de la salida de esta cofradía se pasó apenas tres horas después al clasicismo y severidad de la Hermandad de Humildad y Paciencia, una joven cofradía de sabor antiguo que ayer tuvo el privilegio de reestrenar la iglesia de San Dionisio. Desde allí realizó su estación de penitencia una hermandad que en los últimos años se ha acostumbrado a peregrinar por diversos templos. La cofradía estrenó ayer su único paso, cuyo trabajo de carpintería ha sido realizado por el jerezano Javier Perdigones según un boceto de Francisco Verdugo.

La intención es reproducir en la medida de lo posible la hechura de las andas de la Hermandad de la Vera Cruz de Cádiz, que hasta ahora venía cediendo la cofradía gaditana. A los pies del Cristo sedente, una cruz arbórea también de estreno.

Ramón Gaitero estuvo un año más al frente de la cuadrilla de costaleros, siendo el paso precedido de la solemnidad propia de una capilla musical. El cortejo estuvo integrado por 42 nazarenos, toda vez que el hecho de que la cofradía haya volcado sus esfuerzos en la realización de su único paso ha impedido confeccionar un mayor número de túnicas. Jerez vivió, a las plantas del Señor de Humildad y Paciencia, la primera noche de su Semana Santa.

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