Comienza la campaña de la remolacha más corta de los últimos años

La campaña de la remolacha de este año, que dará inicio este martes, 22 de junio en la única azucarera que permanece abierta en Andalucía, la de El Portal, será una edición mucho más corta que las anteriores pues según las estimaciones agrarias durará alrededor de 50 días.
Será una campaña donde, de los 25 euros que se iban a pagar al principio por cada tonelada de remolacha, gracias a las ayudas europeas para el acoplamiento por el abandono del 50% de la cuota, entre otras subvenciones, se ha logrado estipular el precio de cada tonelada de cultivo de riego entre los 43 y 44 euros, mientras que para secano se consignan entre 44 y 45 euros la tonelada.
Asimismo, la Junta de Andalucía dará a las 1.300 familias de remolacheros una ayuda para la producción integrada de entre 4 y 6 euros la tonelada, unos agricultores que aunque en un principio tenía contratadas 650.000 toneladas a molturar en la Azucarera de El Portal, finalmente por las numerosas inundaciones y heladas de este invierno se van a quedar en unas 425.000.
Así pues, y hablando de cifras, la campaña de este año que arrancará en El Portal en la jornada de hoy prevé una recepción de molturación de unas 8.500 toneladas diarias; 7.813 hectáreas cultivadas de remolacha, de las que 7.042 son de regadío y 771 de secano y la consecución de 70.000 jornales menos, lo que supondrá que sólo se rocen los 150.000 en toda la campaña.
Por otro lado, la calidad de la remolacha, aún habiendo mermado su producción, “no verá disminuida su calidad y esperamos que hasta el final de la campaña haya remolacha que coja bastante peso”, como así informara la asociación agraria COAG el pasado viernes.
Además, según datos del propio Grupo Remolachero, se calcula que este año la campaña vaya a durar entre 50 ó 55 días, muchos menos de los alrededor de 80 de 2009, cuando la fábrica empezó a molturar el 4 de junio y no paró de recoger materia prima hasta el 25 de agosto.
En este sentido, la menor duración de la campaña tendrá importantes repercusiones en el sector agrario, muy castigado este año, pero también en otras actividades como el transporte.