El Ministerio de Medio Ambiente de Portugal no ha confirmado ninguna conversación con el Gobierno de España sobre el trasvase desde la presa de Alqueva para Huelva y Doñana, solicitado por el Parlamento de Andalucía el pasado 11 de octubre a través del Ejecutivo de Pedro Sánchez, que debería enmarcarse en el Convenio de Alqueva entre los dos países. La demanda de agua para la provincia onubense y el parque nacional de Doñana está teniendo amplia repercusión en los medios de comunicación del país vecino.
La agencia lusa de noticias ZAP se ha hecho eco de una respuesta del Ministerio de Medio Ambiente de Portugal al diario portugués Público según la cual hasta el momento no se ha recibido “ninguna solicitud” ni contacto de las autoridades españolas para autorizar el envío de agua a Huelva.
“Portugal está negociando actualmente con España para definir el régimen de caudales en el tramo Pomarão del río Guadiana”, destaca también el Ministerio que dirige Duarte Cordeiro sin hacer ninguna referencia a la presa de Alqueva.
Con el título ‘España quiere agua de Alqueva (y afirma que Portugal tiene el deber de dársela)’, esta agencia de noticias informa de que la sequía está dejando a los agricultores de Huelva, en el Sur de España, “desesperados” y, por ello, se prevé pedir a Portugal que trasvase agua de la presa de Alqueva; es una cuestión de “reciprocidad”, afirman.
“El campo no puede esperar más”. Es de esta forma que las organizaciones agrarias de Huelva piden medidas drásticas ante una “situación de emergencia”, como afirman en un comunicado conjunto.
Así, miran a la presa de Alqueva, en el Alentejo, y quieren “el reparto temporal de derechos de agua” de éste, que es el lago artificial más grande de Europa, para poder regar las explotaciones agrícolas de Huelva y abastecer el acuífero natural de Doñana. La idea es recurrir al Convenio de Albufeira, que contempla la posibilidad de utilizar el agua de Alqueva, que está situada sobre el río Guadiana, en situaciones de sequía extrema.
Portugal y España firmaron hace 25 años el Tratado o Convenio de Albufeira para regular el uso del agua en los ríos compartidos por ambos países (Miño, Limia, Duero, Tajo y Guadiana). La presa de Alqueva -continúa la agencia ZAP- se encuentra, en estos momentos, al 70% de su capacidad mientras que las dos mayores reservas de la provincia de Huelva, Chanza y Andévalo, están al 38% y al 25%, respectivamente. Pero más allá de este argumento, del lado español se sostiene que, dado que Alqueva cuenta con miles de litros de agua que proceden de España, “parece razonable” que Portugal permita el trasvase de 40 a 50 hectómetros cúbicos a Huelva.
Por su parte, el diario Público, habitualmente muy crítico con España en el tema del agua, publicó una primera crónica titulada ‘España, con los pantanos reducidos a charcos, quiere agua de Alqueva para Huelva y Doñana’. Y subtituló: ‘Desesperados, los productores onubenses quieren “el reparto temporal de los derechos de agua de la presa de Alqueva” para regar y Doñana. Apelan a la reciprocidad y la buena voluntad de Portugal’.
Y ya en el interior, comenzaba de una forma harto significativa con “sucedió lo que se esperaba: asociaciones de productores y exportadores y dirigentes políticos regionales piden al Gobierno español que solicite a Portugal el “trasvase temporal de agua de la presa de Alqueva”.
En otra crónica posterior el título ha sido: ‘Andalucía pide a Portugal agua de Alqueva: “El campo no puede esperar más”. Y el subtítulo: ‘Aumenta la presión de los agricultores de Huelva para que se complete el trasvase temporal de agua de Alqueva a la provincia española’.
Jornal de Negocios da por iniciada la negociación, con el siguiente titular: ‘La Junta de Andalucía negocia con Portugal para sacar agua de Alqueva’. Y como subtítulo: ‘Andalucía pide al Gobierno portugués que active el Convenio de Albufeira para poder tener agua en Huelva, donde ya existen restricciones del 50% en el uso del agua para la agricultura y del 10% para la industria’.
Según Jornal de Negocios, el presidente de la Junta Autónoma de Andalucía, Juan Moreno Bonilla, está en conversaciones con las autoridades portuguesas para poder utilizar los recursos hídricos de la presa de Alqueva, la mayor de Europa occidental, situada a sólo 30 kilómetros de la frontera con España.
Este medio afirma que según cálculos de dirigentes regionales y locales de Huelva, donde gobierna el Partido Popular, los agricultores portugueses necesitan 600 hectómetros cúbicos de agua al año para el riego, y los españoles sólo necesitan 100 hectómetros cúbicos para “salvar la campaña agrícola” al año.
Por último, el periódico recuerda que “en 2016, esta posibilidad de ir a buscar agua a Portugal fue planteada por Andalucía, pero fue rechazada por el Gobierno de Mariano Rajoy. Esta semana, el Partido Popular obtuvo el apoyo mayoritario de la Cámara Autonómica a nivel local para pedir al Gobierno de Madrid que negocie formalmente con Portugal”.
LA SEQUÍA DEL LADO PORTUGUÉS
Medios de comunicación portugueses también destacan que el mismo día en que el Parlamento de Andalucía aprobaba la petición al Gobierno de Pedro Sánchez para que actúe ante el Ejecutivo portugués, los ministros de Medio Ambiente y Acción Climática, Duarte Cordeiro, y de Agricultura, Maria do Céu Antunes, participaron en Lisboa en la 17ª Reunión de la Comisión Permanente para la Prevención, Vigilancia y Seguimiento de los Efectos de la Sequía en Portugal.
Los ministros anunciaron la intención del Gobierno luso de entregar, en noviembre, al Parlamento una propuesta de modificación de la Ley de Aguas que permite una intervención “más contundente” en la gestión del consumo, en el contexto de la grave sequía que azota la costa del Alentejo y el Algarve. Duarte Cordeiro incluso admitió la posibilidad de imponer racionamiento de agua por hora o por cliente, en situaciones de urgencia.
El ministro reveló que la situación más grave se da en el sur del país, siendo la costa del Alentejo y la zona del Algarve, en particular la región de barlovento, las zonas más críticas y “más estresadas” por la sequía.
Cordeiro añadió que las previsiones meteorológicas en su país indican que este otoño las temperaturas podrían estar “por encima de lo normal” aunque también hay probabilidad de precipitaciones entre un 40% y un 50% por encima de lo normal.
Según el ministro, las medidas para mitigar los efectos de la sequía se han traducido en una reducción del 14% del consumo de agua para uso agrícola en el Este del Algarve. “También pudimos extender el uso de agua reciclada a dos campos de golf más en esa zona del territorio”, explicó.
