La portavoz de dicho consejo, Milagros Muñoz, alega que el horario, las 20.00 horas, no fue bien recibido por ninguno de los miembros de este órgano de participación, que antes de subir al salón de plenos tenían claro que abandonarían la sala. El hecho de que este consejo no se haya convocado dos veces al año como se acordó en 2008, explica Muñoz, también provocó que el volumen de puntos a tratar, ocho (sustanciales todos por ser referentes a los problemas básicos de cada consejo de distrito), fuera excesivo, por lo que entienden que son motivos suficientes para rechazar tratarlos.
Confirma Muñoz en nombre de todos los miembros de dicho consejo que ni se contribuía a que se pudiera participar de manera holgada y con capacidad suficiente para explicar los puntos, por no demorarse mucho para que todos los distritos pudieran explicarse, por lo que la participación ciudadana en cierto modo queda prácticamente negada, así como ni al ahorro energético ni de sueldos, puesto que habría ciertos empleados municipales que deberían de realizar horas extraordinarias.
Por otro lado, y aunque con razones justificadas de por medio, sólo acudieron dos presidentes de consejos de distrito, Hortensia Aguilar y Blanca Merino, por lo que entiende Milagros Muñoz que hubiera ido imposible tratar o defender todos los puntos del orden del día.
Con todo, admite que el alcalde explicó que, con sólo haber pedido el cambio de horario hubiera sido suficiente, por lo que no se tendría que haber llegado a la situación que se vivió. Pero con todo, los miembros del consejo quieren que el equipo de Gobierno entienda la necesidad de que este tipo de convocatorias se hagan con lógica, por lo que quisieron dar una lección.
Así, entienden que la convocatoria para este consejo debe hacerse con quince días de antelación y no que muchos de los miembros del mismo recibieron la notificación el lunes, es decir, sólo dos días antes de su celebración, por lo que consideran bastante precipitada la convocatoria, por lo que confirman que así es que ni siquiera da tiempo a que los miembros de cada distrito puedan dar debida cuenta de todos los problemas que tienen o por lo menos tratarlos con anterioridad para exponerlos el día clave. Aunque éste fue un motivo de discusión con el primer edil, confían en que de ahora en adelante se hagan las cosas con más sentido común.