Junto con la representación de los trabajadores afectados, algunos de los compradores de la primera fase de la promoción Cala del Sol financiada por Banesto, en solidaridad con la plantilla de yeseros que son los que estaban trabajando hasta hace poco y en demanda de una solución a quien haga falta, porque uno de los principales problemas que tienen es que no saben a dónde dirigirse a pedir ayuda.
Los trabajadores, por regla general, no han cobrado un mes y medio de sueldo y en el caso de los que han sido despedidos, tampoco los derechos laborales que acompañan al despido. Eso está provocando situaciones dramáticas en operarios de un sector que está atravesando lo peor de la crisis actual, por lo que ni siquiera tienen las expectativas de entrar a trabajar en otra obra.
Lo primero que van a hacer en la jornada de hoy, según aseguraban ayer, es comenzar a denunciar los pagarés sin fondo como primera medida y no descartan, tanto trabajadores como compradores, comenzar a denunciar a los responsables de las promociones por una presunta estafa.
Compradores
En lo que respecta a los compradores de los pisos, lo que se planteaban en la mañana de ayer era contactar con Banesto para saber por qué el proceso que se había iniciado para solucionar la situación, que era subrogar la hipoteca, se ha quedado parado de la noche a la mañana cuando se les aseguraba que por ese camino estarían los pisos terminados antes de final de año, aunque con un año y medio de retraso que llevan debido a los múltiples problemas que han tenido con la empresa Aifos y sus subcontratas.
Y es que, según trabajadores y compradores, la realidad es que después de una primera época en la que los pisos comenzaban a levantarse, llegó un momento en que los pagos perdieron cualquier atisbo de normalidad y comenzaron todos los problemas que han llevado a esta situación.
En el mes de diciembre se verán los primeros juicios contra Aifos para que les devuelven el dinero, aunque se trata sólo se algunos compradores que han decidido desistir de tener un piso en Gallineras.
El 90 por ciento de ellos, sin embargo, prefiere seguir adelante con la promoción y han entregado entre 60.000 y 90.000 euros para ello. Por eso tampoco entienden que los parones en las conversaciones con el banco hayan alcanzado también al otro bloque, en el que Unicaja les proponía seguir adelante con la promoción constituyéndose en cooperativa.
