La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, acusó este miércoles al primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, de culpar al invadido y no al invasor en el conflicto entre Rusia y Ucrania y le advirtió de que "en ningún idioma europeo paz es sinónimo de rendición o soberanía es sinónimo de ocupación".
En una aplaudido discurso ante el Parlamento Europeo justo después de la intervención de Orbán, Von der Leyen se refirió a "quienes atribuyen esta guerra a la sed de libertad de Ucrania, y no a la sed de poder de Putin".
"Puede que los europeos tengamos diferentes historias y lenguas, pero no hay ninguna lengua europea en la que la paz sea sinónimo de rendición o en la que soberanía sea sinónimo de ocupación", dijo, ante el aplauso del hemiciclo.
A pocos metros de Orbán, la presidenta del Ejecutivo comunitario se preguntó si quienes en esta guerra culpan al invadido también responsabilizarían a los húngaros de la invasión soviética en 1956 o a los checos y eslovacos por la represión soviética en 1968.
"El pueblo ucraniano lucha por su libertad igual que los héroes que liberaron el centro y este de Europa de la dictadura soviética. Sólo hay un camino para llegar a una paz justa para Ucrania y Europa: debemos seguir empoderando a la resistencia de Ucrania con apoyo político, financiero y militar", apuntó Von der Leyen.
La presidenta de la Comisión Europea criticó también las acciones del gobierno de Orbán en materia de competitividad, donde le acusó de arbitrariedad a la hora de otorgar licitaciones públicas, o de migración, donde le preguntó cómo su promesa de fronteras más fuertes encaja con que Hungría haya liberado a traficantes condenados antes de que cumplieran su pena de prisión completa.
"Esto simplemente es lanzar los problemas hacia el jardín de tu vecino. Todos queremos proteger las fronteras externas, pero sólo lo lograremos si luchamos juntos contra el crimen organizado y somos solidarios entre nosotros", dijo Von der Leyen.