El equipo barreño acudirá al Cuvillo sin entrenador en el banquillo

Algo revueltas bajan las aguas en la entidad barreña que comenzó la semana destituyendo a su técnico y que la finalizará sino cambia el panorama sin poder sentar a su sustituto. El pulso que mantienen su presidente Antonio Prieto y ya ex entrenador, Federico Martínez Gámez, motivó que la cuerda se rompiese por lo fácil. La falta de acuerdo económico hizo que el cordobés Rafael Escobar no pudiera realizar la primera sesión con los gualdiverdes, por lo que la Unión pudiera presentarse al Cuvillo este domingo sin entrenador en su banquillo. Federico Martínez Gámez se convierte en el segundo técnico despedido en estas diez jornadas disputadas.
Curiosamente los dos procedían de equipos del Campo de Gibraltar. Los graves problemas económicos empiezan a pasar factura a una entidad que ha ido perdiendo jugadores con el paso de las jornadas como hicieran José Ángel, que ha sido hasta ahora el último en marchar, o como lo hicieran antes Pablo Rotundo y Guedes.

Y en la que o mucho cambia o parece que finalizará la competición con jugadores locales ante la presumible desbandada de futbolistas ante la inestabilidad económica de hecho, no han cobrado la mensualidad de septiembre. El ex técnico gualdiverde se sinceraba y se reafirmaba en El Faro Información señalando al respecto sobre la inestabilidad que está rodeando a la entidad. “Somos los que estamos pagando los viajes de nuestro bolsillo, y el club no está cumpliendo con los pagos, por lo que para ellos no hay problemas económicos, y somos nosotros los que estamos soportando todos los problemas”.

El propio técnico y jugadores de la zona de Sevilla decidieron entrenar en la ciudad hispalense al objeto de ahorrar dinero en los deszaplamientos.