El crucificado presidió este viernes un histórico besapiés en la iglesia de la Compañía de María
El Santísimo Cristo de la Defensión presidió este viernes en la iglesia de la Compañía de María una solemne eucaristía enmarcada en el cincuentenario fundacional de la corporación nazarena radicada en la iglesia conventual de Capuchinos. De este modo, la cofradía quiso regresar al lugar en el que celebró sus primeros cultos, en 1957, ya que el antiguo convento de Capuchinos se encontraba en ruinas.
El crucificado de Esteve Bonet fue trasladado a la Compañía de María en la noche del pasado jueves, en un acto rodeado de la solemnidad que suele caracterizar en estos últimos años a esta corporación. Una vez en la iglesia de la Compañía de María, el Cristo de la Defensión quedó expuesto en ceremonia de besapiés.
Los actos continuaron en la mañana de este viernes, siendo la imagen trasladada a las 10.00 horas al patio del colegio. Una vez allí, con la presencia del alumnado y de los seminaristas -la Compañía es sede provisional del Seminario Diocesano- se realizaron una serie de meditaciones, finalizando las mismas con el traslado del Cristo al interior de la iglesia, donde continuó el besapiés.
La jornada culminó con una eucaristía, que dio paso al regreso del crucificado a su sede de la iglesia conventual de Capuchinos.
Los actos del cincuentenario de la Hermandad de la Defensión prosiguen este próximo lunes, a las 20.30 horas, con la presentación de un libro que recoge los avatares de su medio siglo de vida. Se trata de un ambicioso proyecto que ha sido coordinado por el académico Francisco Antonio García Romero y que ha contado con la colaboración de Francisco Fernández García-Figueras, Eugenio Vega Geán, Antonio de la Rosa Mateos y Jesús Caballero Ragel. Además, el 30 de octubre a las 20.30 horas se celebrará una misa estacional en Capuchinos coincidiendo con la fecha de fundación.