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El calor congela los abrigos

Los comercios del sector textil subsisten con la ropa de verano, porque el calor provoca que los abrigos no salgan de las perchas

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  • Ropa veraniega para echar un vistazo a chalecos y abrigos, que difícilmente se descolgarán todavía. -
Dicen que a perro flaco, todo son pulgas, y si no que se le pregunten al sector del comercio textil onubense, y, especialmente, a los negocios ubicados en el centro de la capital.
A la más que conocida crisis, agravada por las obras que se están realizando en gran parte de las calles, se le ha unido un ‘veranillo del membrillo’ que se está alargando más de lo habitual, y está provocando que buena parte de las prendas de otoño-invierno estén quedando atadas a sus perchas.
“La situación crítica que vivimos se ha agudizado con las altas temperaturas que estamos pasando”. Son palabras de Juan Miguel Caldentey, presidente de la Agrupación de Comerciantes e Industriales de las Calles del Centro, y propietario la Cadena Raya, quien, aunque no se atreve a hacer un balance exacto del sacrificio económico por el que están pasando, sí que asegura que los negocios del textil “estamos esperando y deseando que empiece a hacer frío”.
“Estamos perdiendo mucho dinero, pero no sabemos cuánto es debido a las obras, cuánto a la crisis, y cuánto al calor”. Lo cierto, que durante gran parte del día, y a pesar de estar a las puertas del mes de noviembre, las temperaturas rozan los 30 grados centígrados, y así, la gente aún sale a la calle ‘vestidos de verano. “No he vendido ni un abrigo. De hecho, ni siquiera me lo han mandado aún”, explica Vicky Montoya, encargada de ‘Don Algodón’. “Ni un abrigo, ni un chaquetón, ni nada de invierno. ¿Quién se va a poner algo de eso con la calor que hace?”, corrobora Enrique Zumalabe, de ‘Confecciones Zuán’. Así que “con la camisa y el pantalón vamos sobreviviendo”.
De esta manera, los comercios del textil viven implorando a la diosa naturaleza una pronta llegada del frío, para que no que se le queden colgadas las prendas de un otoño que no parece que vaya a estar este año mucho tiempo con nosotros. Mientras, noviembre se acerca con chanclas y bermudas, en unos días en el que “en las tiendas nos ponemos a sudar sólo de ver la ropa de invierno que todavía no hemos vendido”.

Calor, al menos, una semana más
El de este año es uno de los otoños más calurosos que se recuerdan en los últimos años en la capital onubense. Así, para no vivir del aire las tiendas de textil se agarran al ‘entretiempo’. “Las prendas de algodón fino la ropa de manga corta están teniendo buena salida”, explica Pío Moreno, encargado de ‘Springfield’, quien asegura que “nos estamos salvando con la ropa de verano”. Y de este tipo de ropa tendrán que seguir comiendo, al menos una semana más, porque las predicciones del Instituto Nacional de Meteorología no prevén que los abrigos vayan a ser muy demandados.
Según el INM, en los próximos días de esta semana, las temperaturas máximas llegarán a los 30 grados, como es el caso del próximo sábado, y las mínimas no serán inferiores a los 16. Además, tal como sucedió en la tarde ayer, miércoles, mañana, viernes, la calor estará acompañada de la sensación de bochorno por la aparición de nubes,con una temperatura máxima prevista de 29 grados centígrados. Ya la próxima semana, bajarán un poquito, pero las máximas previstas llegarán a los 25 grados, y de noche, ‘rebequita’, porque las mínimas podrán bajar a los 13 grados de temperatura.

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