Antequera vivió a lo grande su primera noche en blanco. Las calles de la ciudad se prepararon para un sin fin de actividades, para todos los públicos. Cientos de personas se agolparon por el centro histórico antequerano con el fin de vivir de cerca una cita cultural que no entendía de horarios. A las siete de la tarde comenzaron las actividades en la plaza Castilla con los experimentos científicos de Principia. La calle Lucena fue tomada por un mercado de productos artesanales y de toda clase. El archivo municipal y el museo acogieron talleres, en el que participaron un gran número de personas.

La música puso la guinda a la primera edición de la noche en blanco antequerana con las distintas actuaciones de plaza Castilla, calle San Agustín, Alameda y, el plato fuerte, la actuación de Javier Ojeda en el patio del Consistorio que arrancó a medianoche.