Dentro de sus habituales actuaciones, la Delegación municipal de Medio Ambiente se encuentra mejorando el pequeño parque anexo a la calle Cristóbal Romero, donde incluso se creará un mirador con vistas al recinto ferial y al río Guadalete, el cual se podrá habilitar una vez que los operarios retiren la pantalla vegetal cuyos árboles han crecido mucho los últimos años impidiendo la visibilidad y la entrada en el recinto de la luz natural.
Además, los operarios reponen en esta plaza los muros deteriorados, escalones, solerías y arriates, una vez que han retirado el mobiliario infantil de juego para su restauración en el almacén municipal y posterior reposición.
Por otro lado, la Delegación sigue actuando en la retirada de los frutos de los naranjos sembrados en numerosas calles, principalmente en la Corredera por los efectos que las ramas sin podar ya ocasionaban en las viviendas y balconadas contiguas. En este sentido, se ha procedido a una importante poda de los árboles.
Tanto el delegado de Medio Ambiente, Francisco Muñoz, como el de Urbanismo, Manuel Erdozain, valoraron positivamente esta actuación porque una vez más pone en manos de los ciudadanos un espacio público para su encuentro y disfrute.
Ambos coincidieron en la eficiencia de la mano de obra del Ayuntamiento, en cómo se utiliza el dinero de los impuestos de los vecinos y cómo se mejoran las infraestructuras y servicios públicos.
Paralelamente, Medio Ambiente estudia con los técnicos municipales una importante actuación en el parque anexo a los juzgados, en la barriada El Portichuelo, donde llevará a cabo una siembra de árboles en un lugar baldío, dando mayor lustre al cercano parque infantil.
Con estas obras, la barriada El Portichuelo contaría con una nueva zona verde que se sumaría a las numerosas ya existentes, contando en este sentido con amplios parques para el esparcimiento ciudadano.
