El tiempo en: Puente Genil

Cádiz

La gaditana Sala Práctika acoge exposiciones, academia y estudio de pintura

Inaugurada en abril del pasado 2013 de la mano del matrimonio de licenciados en Bellas Artes Jerónimo Bocuñano y Gracia Gavira, acoge en la actualidad una serie de obras de pequeño y mediano formato y temática cien por cien gaditana.

Publicidad Ai Publicidad AiAndaluc�a Informaci�nPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai
Cargando el reproductor....

Aunar en un mismo espacio una galería de arte, una academia de pintura, un estudio pictórico y un foro de cultura es lo que han conseguido en la Galería Práctika de la capital gaditana. Inaugurada en abril de 2013, este espacio multiusos de la cultura y las artes está dirigido por Jerónimo Bocuñano y Gracia Gavira, un matrimonio de artistas con una historia de arte en su haber.

Jerónimo Bocuñano (Cádiz, 1969) y Gracia Gavira (Sevilla, 1968) se conocieron en la facultad de Bellas Artes de la Universidad de Sevilla donde se licenciaron y desde entonces sus trayectorias personales y profesionales han estado estrechamente vinculadas.

Una vez establecidos en Cádiz, él estuvo trabajando como profesor de Bachillerato en el Instituto de La Salle Viña durante 15 años y junto a ella, simultáneamente, impartía cursos y talleres de pintura tanto de modo privado como en los centros culturales de El Bidón, El Palillero o La Viña.

Una vez liada la manta a la cabeza, la pareja de pintores dejó el trabajo por cuenta ajena y emprendió esta aventura tan empresarial como plástica hace 20 meses, tiempo durante el cual, las paredes de Práctika nunca han estado desnudas, ya que siempre hay alguna obra que exponer, dando siempre un sitio al talento gaditano y a las temáticas de Cádiz, tanto en pintura, como en escultura como en fotografía de gran formato.

En la actualidad y hasta el próximo 15 de enero alberga una exposición de pinturas de pequeño y mediano formato de Gracia Gavira, quien realiza una obra sugerente en la que el color es el agente transformador del paisaje de la Tacita de Plata, en el que centra su trabajo desde hace años y al que consigue dotar de un ambiente mágico y lírico. Poseedora de una pincelada robusta y contundente, su obra esquiva la etiqueta de realismo al uso, situándose heredera al mismo tiempo del realismo mágico andaluz de los 80 como de toda la tradición paisajística europea de la segunda mitad del siglo pasado.

Y dado que se trata también de una escuela de pintura, donde hay grupos de alumnos desde los cinco y hasta los 99 años, a continuación de la exposición actual, tendrá lugar una muestra pictórica con una selección de obras de los alumnos de este espacio de cultura de la calle Parlamento de la capital, que lleva por nombre Central de Arte Práctika.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN