La Guardia Civil de Cádiz, ha culminado la operación denominada “Banderilleros”, con la desarticulación de una organización de narcotraficantes, dedicada a la introducción de hachís por las costas de Conil, incautando 1690 kilogramos de hachís y deteniendo a 16 personas. La organización utilizaba chalets alquilados en Chiclana, que utilizaba como guarderías para la droga.
La operación se inició en el mes de octubre, cuando los guardias civiles del Equipo de delincuencia Organizada y Antidroga, EDOA, tuvieron conocimiento de la existencia de una organización que podría intentar introducir una serie de alijos por las costas de Conil, realizando sus miembros labores de alijo y guardería.
Por tales hechos, se organizaron una serie de vigilancias que permitieron localizar un chalet, alquilado para utilizarlo como guardería tras un alijo inminente.
Estas vigilancias permitieron detectar movimientos de los miembros de la organización, que por su forma de actuar, desvelaba que el alijo que estaban preparando se iba a producir. Por tal motivo, se inició un despliegue que permitió la detención de las diez personas implicadas directamente en el alijo de 360 kilos de hachís que la organización pretendía introducir por la Cala del Aceite (Conil), así como de la embarcación y el todo terreno utilizado.
Este primer éxito de los investigadores, se tradujo en un mejor conocimiento de los métodos empleados por la organización, y que no eran otros que la utilización de una embarcación cargada con una gran cantidad de kilos de droga, a la que se irían acercando otras más pequeñas y discretas para alijar tanto en la costa como en puertos deportivos de la zona.
Las investigaciones posteriores realizadas, permitieron localizar una nueva guardería y conocer los preparativos para la introducción del resto de la droga que tenían lista para alijar.
Tras localizar la embarcación en el agua, una patrullera del Servicio Marítimo de Cádiz, realizó el abordaje de la misma, deteniendo a los dos tripulantes, que esperaban instrucciones para realizar el alijo de 38 fardos de hachís, los cuales una vez pesados alcanzaron los 1330 kilos.
De forma paralela, y tras obtener el correspondiente mandamiento de entrada y registro, se detuvo en la guardería a otra persona, cuya misión era esperar el alijo y realizar labores de custodia del mismo.
La operación culminó con la identificación de las dos personas que componían la jefatura de la organización y que fueron detenidas tras estas actuaciones, además de la investigación de una tercera persona, con lo que la operación “Banderilleros” culmina con la desarticulación y puesta a disposición de la titular del Juzgado Mixto núm. 4 de Chiclana de la Frontera de dieciséis personas, catorce de ellos españoles y dos marroquíes, como autores de un delito contra la salud pública en la modalidad de tráfico de drogas, integrados todos en una organización delictiva que proporcionaba a las mafias del hachís la infraestructura necesaria de puntos de alijo y lugares de guardería para la droga hasta su posterior distribución.