El coordinador local de Izquierda Unida, Juan Manuel Bermúdez Escámez, acompañado por el responsable del área de Medio Ambiente, David Tamayo, convocaron hoy una rueda de prensa para mostrar su alerta por las consecuencias medioambientales, sociales y económicas que "está acarreando la invasión" del alga asiática Rugolupteryz okamurae en el litoral andaluz, ya que sus efectos se han intensificado en las últimas fechas. El responsable de Medio Ambiente la calificó como “una catástrofe medioambiental sin precedentes que está acabando con la biodiversidad del litoral andaluz, con efectos muy evidentes desde Málaga hasta Huelva y con repercusiones económicas sobre la pesca y el turismo”.
Por su parte, Bermúdez alertó sobre la situación "crítica2 que está atravesando el sector pesquero conileño, ya que “la progresión en estos últimos tres meses ha sido tan rápida que los pescadores nos trasladan que un 80 por ciento del caladero local ya está invadido y es impracticable para la pesca artesanal. El palangre en aguas de Marruecos también está afectado, hay especies que ya están desplazadas como el sable, la urta, especies de roca, etc. La zona que aun no está afectada, la del Faro de Roche, que abarca tan solo un 20 por ciento, soporta ya la presión de toda la flota artesanal conileña, mas la que se traslada desde Barbate ya que sus caladeros se encuentran totalmente invadidos. Podemos estar hablando a corto plazo y si no se toman medidas, del fin de la pesca artesanal en nuestro litoral, con las graves repercusiones que ello tendría no solo directas, todos los barcos afectados, sino indirectas sobre nuestra economía”.
El coordinador local confirmó que aun no se han producido la llegada de arribazones a playas, como así lo ha hecho en las localidades de Tarifa y Algeciras, “pero ello no puede suponer que no se actúe, ya que los arribazones son solo la punta del iceberg de la catástrofe medioambiental que se está dando en nuestro litoral, con la inactividad por parte de las Administraciones Central y Autonómica”.
En ese sentido Juan Bermúdez se lamentó de la “fase de negación que aun están transmitiendo estas administraciones, que desde el año 2015 tienen una constancia clara del problema y que con esa inactividad están ocasionando graves daños que no sabemos si serán recuperables. La situación de crisis no permite estar esperando declaraciones como especie invasoras, que no son requeridas para tomar ya medidas urgentes, ni tampoco escudarse en falta de competencias, como hace la Junta de Andalucía, cuyas competencias sobre aguas interiores vienen claramente establecidas en nuestro Estatuto de Autonomía" añadiendo que "en este caso es la sociedad civil y la comunidad científica la que está dando los pasos, con la dejación por parte de la Administración autonómica y estatal". "Es urgente que estas administraciones lideren ya mesas de trabajo y planes de choque, protocolos, etc., que incluyan a todas las partes afectadas y las que pueden colaborar. Solo esa actuación integral podrá dar esperanzas para hacer frente a un desastre ecológico, provocado desde el primer momento por la inactividad del control necesario sobre nuestro medio por parte de las administraciones competentes, y que amenaza con acabar con nuestros medios y formas de vida".
Juan Bermúdez terminó resaltando que "ninguna de estas dos administraciones ha contado con el Ayuntamiento de Conil para sus reuniones", lo cual considera "inadmisible" ya que "ante esta situación debe crearse un frente común entre todas las administraciones, sectores económicos afectados, sociedad civil y comunidad científica que permita establecer líneas, protocolos de actuación y vías para hacer frente a un grave problema que parecen querer silenciar aquellos que tienen la responsabilidad de hacer frente al control o al menos a paliar los efectos del mismo, empezando por sus causas”.
En esta línea, Izquierda Unida presentará al próximo pleno ordinario una moción que "esperamos sea apoyada por todos los grupos políticos".