El Real Madrid ha dado un golpe de autoridad en Miribilla, una cancha donde últimamente no recibía más que sinsabores, y ha avisado de cara a la Copa del Rey de esta próxima semana en Vitoria con un incontestable triunfo ante el Uxúe Bilbao Basket por 74-94, a pesar de la baja de Rudy Fernández.
El equipo blanco no ha notado en ningún momento la ausencia de su principal estrella y la poca presencia de otro de sus mejores jugadores, Jaycee Carroll (0 puntos, -5 de valoración), porque sus compañeros, incluidos los secundarios, un par de ellos -Dontaye Draper y Rafa Hettsheimer- en el cinco inicial, respondieron desde el 0-9 del arranque del choque.
Contestaron esa primera amenaza 'los hombres de negro' con el 10-9 que supuso su única vez por delante en el marcador, pero luego ya no pudieron con sus armas principales exteriores, Alex Mumbrú y Kostas Vasileiadis (11 puntos y solo 2 de valoración entre ambos), desaparecidas y, en general, todos desgastados por la exigencia de su calendario más reciente.
El Madrid rompió su racha de cuatro derrotas consecutivas en el Bilbao Arena y seis en los últimos ocho partidos ante el conjunto vasco con un trabajo fundamentalmente coral, como demuestra que hasta seis de sus jugadores finalizasen el encuentro con 10 o más puntos de valoración.
Lo más destacado, el quinteto nacional formado por los sergios, Rodríguez (13 puntos y 17 de valoración), Llull (21 y 23), Carlos Suárez (8, 9 rebotes y 16), Nicola Mirotic (17, 7 y 24) y Felipe Reyes (12 y 16).
En el Uxúe solo sus dos interiores titulares, Axel Hervelle (21 y 26) y Lamont Hamilton (15, 12 y 24), junto con Raúl López en algunas fases en la dirección, trataron de impedir de una derrota que casi nunca pudieron contestar.
El Madrid saltó a la cancha con un cinco inicial inesperado, en el que la presencia de Draper confirmaba la baja de Rudy Fernández. Sorprendía la titularidad del base americano, pero más aún las de Hettsheimer y Begic junto en la zona.
En el Uxúe también era de reseñar la suplencia de Raúl López, algo que no le había funcionado ahora a Katsikaris demasiado bien.
En todo caso, con su peculiar cinco sobre la cancha los de Laso salieron de estampida y se pusieron 0-9 en apenas dos minutos con Begic de protagonista.
Respondieron los locales, ya con Raúl en pista y con Hervelle como estilete, encadenaron un 10-0 que les colocó por delante en el marcador para el minuto siete (10-9). Retomó el control el Madrid (10-16) para llegar en ventaja al final del primer cuarto (16-20).
Un 0-4 de salida, ampliado posteriormente a 2-9 amplió la distancia de los visitantes a los once puntos (18-29) en solo tres minutos del segundo cuarto. Con Reyes y Mirotic martilleando el aro local, los blancos se mantuvieron en la frontera de los diez puntos de ventaja hasta el descanso (35-43).
En la misma línea siguió el choque a vuelta de vestuarios, a pesar de un primer amago de escapada madrileña (37-48) y un intento de remontada bilbaína (45-48). No dieron más de sí 'los hombres de negro', que parecieron acusar el desgaste de sus últimos partidos al límite.
El último cuarto apenas si sirvió para ver hasta donde alcanzaba la máxima diferencia del partido, que se dio con el 72-92 previo al 74-94 con el que terminó el encuentro.
