El tiempo en: Puente Genil

El Puerto

Condenados a vivir en sociedad

¿Qué quieren que les diga?, yo prefiero que haya muchos de esos de las patadas millonarias y que paguen sus impuestos, que yo los aplaudo

Publicado: 05/02/2021 ·
10:45
· Actualizado: 05/02/2021 · 10:45
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
  • Messi. -

No se trata de demostrar que el contrario es igual de desgraciado que tú, sino que ambos podéis ser igual de afortunados.En la guerra, dicen que proporciona mayor recompensa ver al enemigo vencido que la victoria en sí. Tenemos muchos ejemplos de esta evidencia, algunos en las grandes contiendas globales que se dieron en este mundo, dicen, civilizado.

Y es que no podemos evitarlo, somos así. Por naturaleza, somos una especie condenada a vivir en sociedad, y digo “condenada” por esa tendencia a medir nuestro éxito en función del fracaso de nuestro… iba a decir “prójimo”, pero mejor diré “contrario”.Tal vez sea esa condición humana la que nos nubla la vista y nos impide distinguir lo -al menos para mí- evidente.

Y nos empecinamos en emplear el rasero injusto que nos iguala por lo bajo, cuando lo correcto sería igualarnos por lo alto. No se trata de demostrar que el contrario es igual de desgraciado que tú, sino que ambos podéis ser igual de afortunados. Y es que somos un país de envidiosos, que disfruta con la derrota más que con la victoria.

Y la superficialidad de la envidia nos deja orbitando sobre las cuestiones, como satélites alrededor de un planeta sobre el que nunca se posarán. Porque entrar en las cuestiones de fondo, sin rascar mucho, no se crean, nos igualaría y eso, claro, no nos gusta. Déjenme que les ponga un ejemplo: el caso de Messi y su descomunal nómina.

Ha faltado tiempo para que todos nos rasguemos las vestiduras y nos llevemos las manos a la cabeza, asombrados por la ingente cuantía de su contrato con el FC Barcelona.

La envidia nos corroe y somos incapaces de cuestionarnos qué haríamos nosotros en su caso… ya se lo digo yo, firmaríamos el mismo contrato, ¡no borraríamos ni una coma!No se preocupen, no voy a recurrir al argumento del “si lo gana es porque lo genera”, lo veo demasiado obvio.

No sólo lo genera a su club, sino que lo genera a miles, puede que a millones de personas que de una u otra manera tienen una dependencia laboral o profesional de un deporte como es el fútbol. Sin embargo, nos parece injusto que una persona que se dedica a darle patadas a un balón tenga semejante recompensa por ello… pues nada, ¡dele las patadas usted!

A ver si se lo pagan, que si lo hacen, ya sabe: a firmar sin quitar una coma. Lionel Messi paga sus impuestos, de hecho, de esos alrededor de ciento cincuenta millones de euros que percibe al año, prácticamente la mitad van directos a las arcas públicas ¿No sería más inteligente pedir explicaciones por la gestión de esa cuantía que percibe el estado que atacar a quien paga sus impuestos?

Pues parece ser que no. ¿Qué quieren que les diga?, yo prefiero que haya muchos de esos de las patadas millonarias y que paguen sus impuestos, que yo los aplaudo. ¡Qué más da si le dan con el pie, con la cabeza o con la mano! Maradona lo hizo y lo llamaron dios.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN