El hotel Monasterio San Miguel de El Puerto de Santa María será desalojado el próximo lunes si no se consigue un acuerdo con el actual propietario
El hotel Monasterio San Miguel de El Puerto de Santa María será desalojado el próximo lunes si no se consigue un acuerdo con el actual propietario, el BBVA, lo que traerá consigo la pérdida de 80 puestos de trabajo de su plantilla, entre fijos y eventuales.
El presidente del comité de empresa, Feliciano Domínguez, ha informado hoy en un comunicado de que la plantilla del establecimiento hotelero mantendrán las protestas que están llevando a cabo estos días a pesar de que llegue a ejecutarse el desalojo.
Hasta la fecha, la empresa Hoteles Jale, S.L.U. del Grupo Urbas, ha sido la encargada de la gestión económica del hotel, aunque para desvincularlo del proceso abierto contra el grupo Jale, lo cedieron por un periodo de diez años al BBVA Rentin a principios de 2008.
Feliciano Domínguez ha señalado que la administradora Urbas y el BBVA Renting ya estuvieron semanas atrás a punto de cerrar un acuerdo para que el grupo bancario recuperase el hotel, pero finalmente no se cristalizó.
Los trabajadores llevan varias semanas de protestas pero el acuerdo entre la gestora del hotel y el BBVA no termina de concretarse y mientras tanto se agota el plazo dado por la jueza para proceder el desalojo y devolverlo a la entidad bancaria.
Así lo ha explicado el presidente del comité de empresa quien ha añadido también que la "intranquilidad de la plantilla va en aumento a medida que pasa el tiempo y sigue sin llegar la solución esperada que dé continuidad a la actividad hotelera que desarrolla, con gran reconocimiento y arraigo en la ciudad portuense, este viejo convento reformado, así como garantía de continuidad a sus 80 trabajadores".
Esta preocupación se convierte, según Domínguez, en indignación cada vez que estos empleados piensan en las causas del cierre del establecimiento, "completamente ajenas a cualquier tipo de problema relacionado con el funcionamiento del hotel", porque, tal y como ha recordado el representante sindical, disfruta de un "gran prestigio y reconocimiento en El Puerto y fuera de él, que paga de forma puntual tanto a sus proveedores como a su plantilla".
"No nos entra en la cabeza que tenga que cerrar un negocio que funciona perfectamente y que los trabajadores nos quedemos sin empleo por una cuestión que no tiene nada que ver ni con nuestra labor, ni con el servicio que se ofrece en este hotel, que como consecuencia del cierre, perderá muchísimo dinero", ha concluido.