La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) elige este sábadoa la dirección encargada de dirigir el colectivo durante los próximos dos años. Sus más de 4.000 asociados tendrán que optar entre dos candidaturas --lideradas por Ángeles Pedraza y Paulina Cerezal-- que han cruzado reproches y acusaciones mutuas durante las últimas semanas.
Los socios tendrán en primer lugar que votar las cuentas del último año y la gestión de la actual junta directiva y después ya someterán a votación las dos candidaturas presentadas. Pedraza tratará de revalidar su cargo al frente del principal colectivo de víctimas mientras que Cerezal, viuda de un ex guardia civil, quiere arrebatarle el liderazgo para recuperar el espíritu de "rebelión" que de la AVT.
Las elecciones llegan en un ambiente crispado después de que la candidatura alternativa acusara al equipo de Pedraza de "opacidad", falta de transparencia en las cuentas y falta de firmeza en política antiterrorista; además de señalar directamente a algunos socios de la asociación y acusarles de estar inmersos en procesos judiciales o haber facturado a cargo de la AVT trabajos de asesoramiento.
Ante estas acusaciones, varios socios del colectivo han iniciado ya acciones legales y Pedraza acusó a sus detractores en declaraciones a Europa Press de intentar "hacer daño" a la AVT con tal de hacerse con el poder de la asociación. Además, cuestionó su interés en el colectivo cuando ocho de los nueve miembros de la lista alternativa no han participado en las asambleas de los últimos años.
Ángeles Pedraza, cuya hija falleció en los atentados del 11-M en Madrid, llegó al frente de la AVT en 2010 después de haber ocupado el cargo de vicepresidenta con Juan Antonio García Casquero como 'número uno'. Fue la primera presidenta de la asociación que no era víctima de ETA.
Ahora Pedraza quiere revalidar el cargo para los próximos dos años para lograr la derrota "total y definitiva" de ETA y "que los políticos no ganen esta batalla y que todo acabe en tablas y se olvide lo que ha pasado durante 50 años", además de seguir atendiendo psicológica y socialmente a las víctimas.
En la lista está acompañada por José Marco, sargento del Ejército herido por ETA; Pascual Grasa, guardia civil herido en el atentado contra la casa cuartel de Zaragoza; Narcisa López, madre de una víctima de la banda; y Carmen Teba, viuda de un fallecido el 11-M.
Por su parte, Paulina Cerezal, viuda del ex guardia civil y trabajador de Iberdrola Francisco Díaz de Cerio asesinado por ETA en 1991 en Bilbao, quiere asumir el liderazgo de la asociación con una lista de la que forman parte personas como la viuda de Fernando Múgica o María Jesús González, madre de Irene Villa.
María Jesús González, que resultó herida en el atentado que sufrió junto a su hija también en 1991, ocupa el sexto puesto de la candidatura como vocal. Ya fue vicepresidenta del colectivo cuando estaba presidido por Francisco José Alcaraz.
Por su parte, Mapi de las Heras, viuda del dirigente socialista Fernando Múgica, ocupa el último puesto de la lista también como candidata a vocal. Como vicepresidente se presenta el capitán del Ejército Gonzalo Villamarín, víctima del 11-M, y la completan personas que ya han ocupado puestos de responsabilidad en la AVT, como Santiago Busqué o Carmen Miranda; además del ex guardia civil Alejandro Urteaga.