El precio de la vivienda, tanto nueva como usada, se encareció en agosto un 5,2 % con respecto al mismo mes del pasado año, una comparativa que se lleva a cabo frente al periodo de mayores caídas de precios registrado en el segundo semestre de 2020 a causa de la pandemia de coronavirus, según la tasadora Tinsa.
A pesar de este incremento interanual, marcado por este efecto, el precio de la vivienda moderó su subida en agosto a un 0,4 % en tasa mensual (respecto a julio), manteniendo una tendencia de crecimiento moderado, según los datos de la tasadora.
Además, considerando los ajustes que se produjeron durante 2020 y la recuperación progresiva posterior, el precio medio en España es un 3,3 % superior al de marzo de 2020, cuando se inició la crisis sanitaria.
En base a estos datos, desde Tinsa señalan que la recuperación general avanza a un ritmo más adelantado de lo previsto en un contexto de mantenimiento de los estímulos económicos en Europa y de los bajos tipos de interés y que el mercado residencial se enmarca en un escenario de incremento sostenido de precios, demanda creciente y oferta limitada.
En concreto, en el mes de agosto el mayor incremento interanual de los precios se dio en las islas, donde la vivienda se encareció un 7,9 %, seguida del resto de municipios (7,1 %); la costa mediterránea (6,1 %); las áreas metropolitanas (4,9 %) y las capitales y grandes ciudades (3,8 %).
Por su parte, a nivel mensual, el precio de la vivienda subió un 4,2 % en las islas, un 1,1 % en el resto de municipios y un 0,5 % en las capitales y grandes ciudades. No obstante, se anotó un descenso del 1,6 % en las áreas metropolitanas y del 0,6 % en la costa mediterránea con respecto a los valores de julio.
Desde el inicio de la pandemia, los grupos que mostraron un mayor recorrido al alza fueron los municipios más pequeños del interior y la costa atlántica, con un aumento del 4,5 % respecto a marzo de 2020, y las capitales y grandes ciudades, donde la diferencia anual alcanzó el 4,3 %.
Además, desde el mínimo registrado tras la crisis financiera de 2008, la vivienda se ha revalorizado de media en España un 21,7 %. Sin embargo, se mantiene un 30,2 % por debajo de los máximos de 2007.
Las islas son el grupo donde más se ha incrementado el valor medio desde su mínimo, un 38,4 %, seguido de las capitales y grandes ciudades (31,2 %). En el otro extremo, el resto de municipios apenas se ha revalorizado un 10,8 % desde sus mínimos.