El PP y el PSOE tienen previsto reunirse en la tarde de este miércoles para abordar la crisis que vive el Ayuntamiento de Granada, donde Luis Salvador (Cs) se mantiene como alcalde en un gobierno local con el único apoyo de un concejal de su partido, y explorar posibles soluciones frente a esta situación.
El secretario general de los populares granadinos, Jorge Saavedra, ha informado de que se sentarán con los socialistas con el ánimo de escuchar sus propuestas y de que ellos escuchen las suyas, y ha asegurado que "desde el principio" el PP sostuvo que hablaría con todas las fuerzas políticas de la corporación.
Saavedra ha recordado que su partido ya descartó la propuesta de moción de censura planteada por el PSOE, con un plazo de 72 horas que -a su juicio- "no tenía sentido", pero que sí está dispuesto a "hablar en serio de opciones reales que puedan ser viables".
El dirigente popular ha considerado "necesario y "muy urgente" desbloquear la situación en la capital granadina y ha recordado que la primera opción del Partido Popular es mantener un gobierno de coalición como el que tenía con Ciudadanos, pero ahora con un alcalde del PP.
"Pero no por un capricho nuestro, sino porque es lo que votaron los granadinos de forma mayoritaria, un gobierno de centroderecha", ha subrayado Saavedra, quien tras situar esa como "primera opción" ha apostillado que está dispuesto a hablar con el PSOE para "desbloquear de manera inminente la situación".
Por su parte, la viceportavoz del grupo municipal socialista, Raquel Ruz, ha dicho que su partido acude el encuentro de esta tarde "con total transparencia", como ha hecho en los mantenidos anteriormente y a diferencia de lo ocurrido hace dos años entre PP y Ciudadanos.
"No tenemos trapos sucios que ocultar", ha sentenciado Ruz, quien espera que el PP esté pendiente "de lo que la ciudad necesita".
En este sentido, ha apostado por que no esté preocupado de su futuro como partido o el de sus concejales, dado que ante una situación "tan grave" cree que "todo el mundo tiene que ser generoso" con la ciudad y con miras "más altas y a largo plazo" que no pasen por ver "dónde me siento mañana".