El Juzgado de lo Penal número 3 de Huelva ha condenado a seis meses de prisión y al pago de una multa de más de 1.000 euros, a razón de seis euros diarios durante seis meses, a un hombre como autor de un incendio forestal con imprudencia grave en una finca rústica ubicada en San Bartolomé de la Torre, de su propiedad, a causa del contacto de las partículas incandescentes y chispas de la línea eléctrica, que daba servicio a la zona. El incendio se extendió al terreno colindante afectando a casi cinco hectáreas --unas 0,19 de matorral y 4,16 de zona agrícola--.
Según reza en la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, en concepto de responsabilidad civil, el juez le impone el pago de una indemnización de 3.381,67 euros a la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía por los gastos de extinción del incendio.
El juez considera probado que el condenado, propietario de una finca rústica ubicada en San Bartolomé de la Torre, debía ocuparse de la vigilancia y control de la línea eléctrica de baja tensión, que discurría y que daba servicio a la citada finca, y estaba obligado a su perfecto mantenimiento en condiciones de evitar riesgo de incendio.
No obstante, asegura que el tendido eléctrico, utilizado para dar servicio a la extensión, carecía de las mínimas medidas de seguridad debido al "deficiente mantenimiento de la misma con abundante pasto en su base", siendo el acusado, como responsable de mantenimiento de la mencionada línea, el que contravino "las más básicas y primarias normas de cautela".
El juez considera probado que en el citado lugar, sobre las 15,30 horas del 8 de junio de 2012 --época de peligro alto y situación de alarma--, y al contactar las partículas incandescentes y chispas de la línea eléctrica en la zona de existencia de una torreta (punto de apoyo de electricidad), se extendió este fuego, el cual fue sofocado definitivamente por el Infoca sobre las 20,30 horas de ese mismo día.
En el juicio se presentó un informe pericial, elaborado por agentes de la Consejería de Medio Ambiente adscritos a la Brigada Provincial de Investigación de Incendios Forestales y iniciado el mismo día del incendio 8 de junio de 2012, en el que se determina que la causa del mismo fue "la negligencia por deficiente mantenimiento de la línea eléctrica".
Cabe recordar que el Ministerio Fiscal calificó los hechos como constitutivos de un delito de incendio forestal, por imprudencia grave. Por ello, solicitó la pena de ocho meses de prisión y una multa de casi 2.000 euros, más la indemnización a la Junta de Andalucía.