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Huelva

Un curso para hacer frente al odio a la diversidad desde la formación

Actividad pionera, que arranca este miércoles en la Universidad de Huelva, para avanzar en la lucha contra la discriminación al colectivo LGTBIQ+

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  • Presentación del curso. -

El 27 de diciembre de 2013, el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía declaraba la antigua cárcel de Huelva Lugar de Memoria Histórica LGTBIQ+. Entre 1968 y 1979, el centro penitenciario onubense se convirtió en la prisión en la que se internaba a los presos homosexuales castigados por la Ley de Vagos y Maleantes, una ley que declaraba “en estado peligroso” al homosexual y que planteaba la cárcel como una rehabilitación. Allí se les sometía a trabajos forzados, palizas, humillaciones y prácticas pseudo médicas, como las descargas eléctricas, para curar lo que se consideraba una enfermedad.

No es casualidad que, seis años después de esa declaración, Huelva dé un paso más en el reconocimiento a ese colectivo y abra camino con un curso pionero en diversidad afectivo sexual, identidad de género y otras manifestaciones.

Belén Ríos, responsable de este curso, entiende que no sólo no es casualidad, sino que era “necesario” que Huelva pusiera en marcha este “gran reto” que es pionero no sólo por su durabilidad -75 horas-, sino porque hasta hora todas las actuaciones han ido encaminadas a la sensibilización, y con este curso que empieza mañana se amplían los objetivos: “Información, formación básica y especializada, sensibilización, concienciación y, por supuesto, recuperación de la memoria histórica y democrática”.

Profesora de la Universidad de Huelva y gerenta de Eutopía Formación, además de “persona, mujer, feminista de izquierdas, trabajadora social, comunicadora y activista de la diversidad afectivo sexual, identidad de género y otras manifestaciones”, cree que hasta la fecha no se ha avanzado lo suficiente en la materia. “Hasta la finalización del siglo XX ha habido gestos escasos y teóricos, y en el siglo presente, en España, hubo un impulso ingente a nivel político, impulsado por el PSOE y con las alianzas de IU”, pero ahora Andalucía, “siendo pionera en esta materia y otras”, se expone a “un retroceso sin precedentes desde la democracia”, indica al respecto.

De ahí que afirme que los desafíos actuales pasan por “defender lo hasta ahora conquistado” y “contrarrestar el odio, la persecución, las discriminaciones, las violencias, las provocaciones constantes de ‘seres grises’ que están heridos de gravedad por la deshumanización y las fobias”.

La juventud es el futuro, lo que cale en su mente y en su conciencia dibujará el devenir de la sociedad, de ahí que Ríos insista en que “la formación es el epicentro de la solución”, y más ante un colectivo “con gran potencial y fortaleza, pero a su vez vulnerable” que tiene que hacer frente a “demasiados discursos populistas, irracionales, lgtbiqfóbicos y violentos en las redes sociales”.

Por eso, desde la formación, este curso que empieza este miércoles en la Facultad de Trabajo Social pretende hacer justicia con un colectivo maltratado  históricamente y sembrar las bases de un futuro alejado del odio a la diversidad.

Por último, Ríos ha mostrado su agradecimiento a la concejala de Políticas Sociales del Ayuntamiento de Huelva, María José Pulido, porque “ha creído en este gran reto, sin dudarlo”; al igual que a Josefa Jiménez, jefa del Departamento de Servicios Sociales, y a la decana de la Facultad de Trabajo Social, Pilar Blanco.

La formación está dirigida al alumnado de la Universidad de Huelva, especialmente de Ciencias Sociales y Humanas.

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