El obispo de Asidonia-Jerez, José Rico Pavés, ha vuelto a alimentar la posibilidad de habilitar el Sábado Santo como jornada procesional.
“Hay un signo importante que tenemos que cuidar y si a eso nos ayudan las procesiones en ese día, bendito sea Dios, vamos por el buen camino”, subrayó el prelado en el transcurso del programa Carrera Oficial, que se emite en Cope Jerez.
Monseñor Rico Pavés puso sobre la mesa una cuestión que no debe pasarse por alto, y es que “cuando se decretó” la supresión del Sábado Santo como jornada procesional -en 1983- la Semana Santa de Jerez “era mucho más reducida” que ahora y contaba con un menor número de cofradías.
“El solo crecimiento de la Semana Santa es un argumento a considerar, por la dignidad que requiere cada cofradía”, añadió. A ello debe sumarse la “sensibilidad” que el pastor parece haber observado en quienes demandan que haya procesiones el Sábado Santo acerca de “lo que la Iglesia quiere transmitir” en esta jornada tan singular desde el punto de vista litúrgico.
Sea como fuere, monseñor Rico Pavés admitió que “nunca había hablado tanto del Sábado Santo” como desde que tomó las riendas de la diócesis.
Incluso, valoró que Pablo Baena abordara este asunto en su Pregón, sobre todo porque a su juicio lo hizo “con argumentos sólidos” que él mismo puede compartir y que sin duda le van a “ayudar a tomar una decisión cuando haya que tomarla”.
El obispo de Asidonia-Jerez volvió a incidir en el importante papel que la Iglesia reserva a las hermandades y cofradías a pesar de que en el pasado “algunos creían” que respondían “a una forma de fe superficial que había que desterrar”.
Ahora, esas personas “han pasado y las hermandades no”, cumpliendo además un papel misional que consideró imprescindible para “la transmisión de la fe”.
Rico Pavés puso el ejemplo de la nueva Agrupación Parroquial de la Humildad de Barbadillo, cuyos miembros “han tenido que aguantar los sinsabores de algunos eclesiásticos pero nunca quisieron romper con la Iglesia”.
