La Junta de Andalucía está ya “próxima” a adjudicar las obras que transformarán el antiguo edificio de Díez-Mérito en un centro de salud con unidad de cirugía mayor ambulatoria toda vez que la Mesa de Contratación ha evaluado ya las ofertas de las siete empresas que concurrieron a la licitación, comprobándose además que todas ellas cumplían con los requisitos de los pliegos.
La adjudicación será por tanto inmediata, pero el inicio de las obras precisa de un último trámite administrativo que la Administración autonómica entiende que no está en su mano, ya que no es la propietaria del edificio.
En efecto, el Ayuntamiento de Jerez aprobó en el Pleno ordinario del pasado mes de mayo la cesión demanial de la finca a la Junta de Andalucía para la construcción del centro de salud, pero la Administración autonómica no ha recibido todavía la documentación que lo acredite.
De hecho, la propia delegada territorial de Salud y Familias, Isabel Paredes, ha remitido un escrito a la alcaldesa, Mamen Sánchez, solicitando “la aportación de la documentación necesaria al objeto de conformar el oportuno expediente patrimonial de aceptación de la cesión gratuita de la titularidad” del edificio de Díez-Mérito.
Sólo así será posible el inicio de las obras de reforma de este antiguo complejo bodeguero, que fue también sede de la Escuela Universitaria de Relaciones Laborales y que se encuentra abandonado y viene siendo objeto de expolio continuo desde hace ya demasiados años.
Las obras tienen un plazo de ejecución de 20 meses, habiendo sido presupuestadas en 9,6 millones de euros (IVA incluido), que serán financiados en su totalidad por los fondos Feder de la Unión Europea (UE).
El futuro centro de salud y la unidad de cirugía mayor ambulatoria ocuparán tanto el “edificio señorial” del complejo de Díez-Mérito con fachada a la calle Ferrocarril como el casco bodeguero anexo que tiene salida hacia la calle Madre de Dios.
El proyecto contempla que se respeten todas las fachadas existentes, atendiendo a la condición de edificio protegido y catalogado.
La reforma de la edificación cumple con toda la normativa urbanística vigente, adaptando el nuevo programa a la espacialidad y escala existentes, dejando libre el mayor espacio posible en el interior de la nave.
Igualmente el nuevo uso respeta y recoge los sistemas constructivos utilizados, de tal forma que se integra a la nueva edificación con naturalidad.
Para respetar la iluminación y ventilación de la nave existente se plantean unos lucernarios, integrados de forma natural y sencilla en la cubierta de tejas.
Por último, se propone una reserva en la planta semisótano para las instalaciones y el centro de transformación, con acceso directo desde el exterior.