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Álvaro Quirós conquista Dubai

El golfista logró encadenar tres tarjetas de 68 impactos (-4) que le catapultaron al triunfo final

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  • Quirós con el trofeo -
El golfista guadiareño Álvaro Quirós se adjudicó ayer el Omega Dubai Desert Classic, perteneciente a la Carrera a Dubai del Circuito Europeo, tras completar una remontada vibrante en una intensa jornada final.

Quirós ganó con un total de 277 golpes, 11 bajo par y uno menos que el sudafricano James Kingston y el danés Anders Hansen. El golfista campogibraltareño necesitó tratamiento en su brazo durante la jornada, pero finalmente alcanzó el triunfo.

El guadiareño empezó arrollando en los cinco primeros hoyos, que resolvió con un eagle y dos birdies, pero la victoria se le alejó en el hoyo siete por culpa de un triple bogey. Un nuevo birdie precedió al gran momento del torneo, el hoyo en uno que Quirós embocó en el 11. Desde ese momento, gestionó su renta y ganó tras otro birdie y otro bogey.

Quirós demostró su valía como pegador con el drive, a lo que añadió un extra de confianza y seguridad con el putter, que fue la clave de su victoria. Mentalmente muy fuerte, el guadiareño remontó su primera jornada de 73 golpes para encadenar tres tarjetas de 68 impactos (-4).

Tras su triunfo, Quirós se mostró “contentísimo” y “feliz”, sobre todo “por haber ganado un torneo en el que estaban todos los buenos y en difíciles condiciones”.

El jugador repasaba que “en el hoyo dos hice eagle pegando el drive y me pasé unos siete metros de bandera, pero la enchufé desde fuera. En el siguiente, par 5, birdie con una sacada de bunker muy buena dejándola a medio metro”. Ya en el hoyo cinco, otro birdie “con un putt muy difícil de izquierda a derecha desde unos cinco metros. Estaba tranquilo, iba jugando muy bien y sentía que llevaba todo bastante controlado”.

Luego, el hoyo ocho, un triple bogey que “enseguida lo arreglé con otro birdie en el nueve pegando muy buen segundo golpe con el hierro siete y dejando la bola a seis metros”. De ahí el hoyo uno en el once, “un subidón. Pegué tres cuartos de wedge desde 143 metros ¡y cata-clá! Siempre es difícil hacer hoyo en uno pero en la última vuelta y bajo presión, mucho más”.

Como colofón, Quirós repasó que “llevo tiempo jugando bien, controlando situaciones que antes se me escapaban. La semana pasada estuvo a punto de caer y creo que esta vez merecía ganar”.

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