En vela y temiendo que en cualquier momento el episodio que vivieron a la una de la mañana se repitiera. Así pasaron la noche de ayer vecinos de la calle Manuel López Cepero después de que unpequeño rayo impactara contra una vivienda mientras sus ocupantes, dos mujeres mayores, dormían. Afortunadamente no se produjeron daños personales pero el susto fue mayúsculo. “La casa tembló, parecía que era una bomba”, señala Pepi Rubio, que vive dos puertas más adelante de la casa cuya fachada se vio afectado por el rayo.
Desde ese momento no pudo pegar ojo, al igual que su pareja y otra de sus hijas pequeñas. “No parábamos de asomarnos a la ventana porque parecían que estaban lanzando cohetes que no terminaban de explotar hasta que en un momento dado cuando estábamos en el salón una de las veces me deslumbró”.
Fue entonces cuando ella y su pareja escucharon un fuerte estruendo y pensaron que había caído en su coche. Cuando se asomaron vieron que estaba intacto, pero el rayo impactó contra dos casas más de al lado, donde las consecuencias eran ayer visibles en los restos de hollín de la fachada. Acto seguido se fue la luz, que volvió a lo largo de la mañana con varias interrupciones. Bomberos y Emergencias Sanitarias se trasladaron hasta esta calle en una noche demasiado larga para sus vecinos, que aseguran que hace un año ya vivieron un capítulo similar.