Entre un 10 y un 15% de los hombres de trono, costaleros o portadores suele sufrir lesiones derivadas del esfuerzo llevado a cabo durante la Semana Santa, “habitualmente con tendinitis de hombro o tobillo, roturas musculares, hombro congelado o lesiones articulares, que tratamos en nuestra Unidad de Tratamiento Percutáneo de Lesiones Músculo-Esquelética de forma mínimamente invasiva”, explica el doctor Ernesto Rivera.
Esta Unidad, en la que “evitamos lesionar estructuras vecinas gracias a que trabajamos guiados por técnicas de imagen”, está especialmente destinada a deportistas de todas las edades y disciplinas, muy habitualmente corredores y deportistas de raqueta, pero también es un recurso del que hacen uso los portadores de Semana Santa para el tratamiento de las secuelas mencionadas anteriormente. Y es que en la Unidad de Tratamiento Percutáneo de Lesiones Músculo-Esquelética “hemos tratado de tendinitis calcificante del hombro a más de 300 pacientes con demostrada eficacia en los últimos años. Todo esto partiendo también del exhaustivo diagnóstico por la imagen desde la misma unidad para conseguir tratar el punto exacto que genera las molestias al paciente”.
En cualquier caso, el doctor Ernesto Rivera, especialista del Servicio de Diagnóstico por la Imagen y responsable de la Unidad, anima a adelantarse a estas lesiones con algunas de estas recomendaciones prácticas: fortalecer en las semanas o días anteriores la musculatura que se vaya a ejercitar; calentar antes de la procesión, especialmente para aquellos grupos musculares más involucrados en el esfuerzo posterior; Aprender y practicar la adopción de una correcta postura para la carga; elección de prendas y calzado cómodos: lo idóneo es ropa cómoda y no muy ajustada que facilite los esfuerzos y la respiración. Por otro lado, la selección de un mal calzado deriva, en un alto porcentaje, en problemas tendinosos en las semanas posteriores a la procesión; hidratación adecuada durante el esfuerzo, en pequeñas cantidades, para evitar la deshidratación.
Unidad de Tratamiento Percutáneo de Lesiones Músculo-Esqueléticas
La Unidad de Tratamiento Percutáneo de Lesiones Músculo-Esquelética aborda de forma mínimamente invasiva y a través de técnicas de imagen (ecografías y Rayos X) una amplia variedad de patologías de traumatología y reumatología, evitando cirugías en muchos de los casos. Según explica el doctor Ernesto Rivera, las técnicas percutáneas “son sencillas pruebas practicadas bajo anestesia local con agujas finas que, guiadas con ecografía, tratan directamente la causa de los síntomas sin dañar estructuras vecinas y sin necesidad de intervenciones quirúrgicas”.
Cuenta con una amplia cartera de procedimientos, entre los que se incluyen tanto procedimientos diagnósticos, como resonancia magnética artrografía o artro-resonancia (artro-RM) y artro-TC (artro TC y artro-RM), como procedimientos terapéuticos: infiltraciones articulares y tendinosas, drenaje y esclerosis de gangliones o quistes de Baker, infiltraciones ecoguiadas de neuroma Morton o de la fibromatosis plantar, artrocentesis ecoguiadas, hidradilatación capsular (capsulitis adhesivas), drenaje de hematomas musculares y la infiltración con factores de crecimiento (PRP) para lesiones musculares y tendinosas.
Tras el éxito desde la puesta en marcha de la Unidad de tratamientos como la tendinitis calcificante del hombro, incorpora ahora nuevos servicios como: tratamiento de hematomas perimusculares y/o roturas musculares, para aquellos pacientes que han sufrido una rotura muscular con un hematoma de tamaño significativo, de tal manera que el drenaje del mismo ayuda a la cicatrización precoz y disminuye la tasa de recaídas; tratamiento de la capsulitis adhesiva u hombro congelado, en el que utilizando la guía ecográfica conseguimos distender la articulación y por tanto mejorar la limitación de la movilidad que presenta este tipo de pacientes; tratamiento de codo de tenista y/o golfista, siendo especialmente frecuente en estos deportes, pero que cada vez vemos de forma más habitual en población general derivado de la actividad laboral; tratamiento de tendinitis Aquílea, que es una afección muy frecuente en corredores. Partiendo del correcto diagnóstico ecográfico, identificamos la zona afectada y la tratamos de forma dirigida con las distintas herramientas que disponemos y evitando lesionar el tejido no patológico; tratamiento del dedo en resorte o dedo en gatillo: estos pacientes sufren dolor o dificultad para la flexión o extensión de los dedos de la mano, especialmente por la mañana debido a un engrosamiento de una estructura de los dedos llamadas poleas. Utilizando la ecografía, conseguimos liberar al tendón en una gran cantidad de los casos; tratamiento de la artrosis de cadera: mediante las terapias biológicas ecoguiadas, se consigue retrasar la colocación de prótesis de cadera mediante la utilización de inyecciones de ácido hialurónico.
Además, desde la Unidad de Tratamiento Percutáneo de Lesiones Músculo-Esquelética continúan realizando infiltraciones ecoguiadas en múltiples zonas de la anatomía, tratamientos de tendinopatías severas con roturas parciales mediante plasma rico en plaquetas y otros tratamientos.
Entre las ventajas del tratamiento percutáneo de estas lesiones, el especialista en Radiología y Diagnóstico por Imagen señala “las altas tasas de respuesta al tratamiento, la inexistencia de suturas y cicatrices quirúrgicas, sin necesidad de ingreso hospitalario, con reincorporación temprana al campo sociolaboral o a la actividad deportiva, con baja tasa de complicaciones y menor coste que la intervención quirúrgica”.