La Junta de Jefes del Estado Mayor de Corea del Sur ha confirmado este domingo la deserción de un soldado norcoreano que mató a tiros a dos de sus superiores y cruzó la Zona Desmilitarizada --la frontera de ambos país, fuertemente minada-- a mediodía de ayer, hora local.
Los guardias fronterizos de Corea del Sur escucharon seis disparos pocos minutos antes de detectar al soldado, que corría hacia su lado de la línea divisoria. Los guardias emplearon un megáfono para dialogar con el evadido, que confirmó su intención de desertar.
El soldado, cuyo rango no ha sido desvelado, estaba desarmado en el momento de su rendición, según el comunicado del Ejército, recogido por la agencia oficial de noticias surcoreana, Yonhap.
Una vez bajo custodia, informó de que había matado a sus líderes de pelotón y escuadrón mientras hacía guardia. Este dato coincide con lo observado en la frontera, donde los guardias surcoreanos vieron la recogida de dos cadáveres en un puesto de control del lado norcoreano, a solo 500 metros de distancia.
