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Provincia de Granada

Tres detenidos en la provincia por traficar con marihuana y por su cultivo ilegal

La primera actuación tuvo lugar durante la madrugada de este martes en la A-44, a la altura del kilómetro 112, en el término municipal de Albolote, donde la Guardia Civil observó que un turismo Seat Ibiza circulaba en dirección a Jaén a gran velocidad, invadiendo los dos carriles de la calzada

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La Guardia Civil ha detenido a tres personas en la provincia de Granada como presuntas autoras de dos delitos contra la salud pública, dos de ellas por tráfico de droga y la otra por cultivo y elaboración de sustancias estupefacientes.

   La primera actuación tuvo lugar durante la madrugada de este martes en la A-44, a la altura del kilómetro 112, en el término municipal de Albolote, donde la Guardia Civil observó que un turismo Seat Ibiza circulaba en dirección a Jaén a gran velocidad, invadiendo los dos carriles de la calzada.

   Los agentes intentaron interceptarlo, pero al darle el alto el conductor hizo caso omiso y continuó su marcha a gran velocidad, según informa en un comunicado el Instituto Armado.

   La Guardia Civil salió en busca del vehículo y varios kilómetros después, cuando los ocupantes comprobaron que una patrulla aún los seguía, arrojaron una caja de cartón que, como se comprobó después, contenía más de medio kilo de marihuana.

   Finalmente, la patrulla de la Guardia Civil de Alfacar logró interceptar el vehículo y detener a sus dos ocupantes como presuntos autores de un delito de tráfico de sustancias estupefacientes. Los dos arrestados son vecinos de Andújar (Jaén) de 21 y 30 años respectivamente.

PLANTACIÓN EN BENALÚA

   La segunda actuación tuvo lugar en Benalúa (Granada), donde la Guardia Civil ha desmantelado una plantación doméstica de cannabis sativa que el detenido cultivaba en uno de los dormitorios de su domicilio.

   Los guardias civiles de ese puesto acudieron a entrevistarse con el ahora detenido, ya que algunos vecinos se habían quejado del fuerte olor a marihuana que salía de su domicilio, cuando escucharon un ruido constante de una de las habitaciones.

   Al preguntarle tanto por el olor como por el ruido, el propietario de la vivienda confesó que estaba cultivando cannabis y accedió a que los agentes hicieran un registro voluntario dentro del domicilio.

   La Guardia Civil comprobó la existencia de una plantación de cannabis sativa y decomisó las 40 plantas que el detenido cultivaba en su casa, además de un ventilador industrial y dos focos halógenos de grandes dimensiones que facilitaban el crecimiento de la plantación.

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