El Juzgado de Instrucción número 8 de Granada ha incoado diligencias previas contra el que fuera director-gerente de Visogsa, José Luis H.P., por el presunto acoso laboral a un trabajador, que estuvo empleado en la empresa provincial de vivienda realizando servicios de informática desde 2002 hasta 2010.
En un auto de fecha 18 de septiembre, al que ha tenido acceso Europa Press, el juez admite a trámite la querella interpuesta por el trabajador y enmarca los hechos denunciados en un posible delito de integridad moral y acoso laboral.
Fue antes del mes de julio de 2009, gobernando en la Diputación de Granada PSOE e IU, cuando el empleado asegura en su denuncia que era "continuamente ninguneado" por el gerente, con cuestiones como no recibirlo nunca cuando le pedía cita para cuestiones laborales, o no siquiera devolverle los saludos cuando se cruzaban. Pero fue a partir de esa fecha cuando la situación derivó en "acoso", "trato humillante" y degradación tanto personal como laboral, según consta en la denuncia, a la que ha tenido acceso Europa Press.
Así, el primer episodio, en julio de 2009, se produjo cuando el querellante se encontraba de vacaciones y fue instado a que las abandonara y acudiera a la empresa a publicar en la web una determinada información. Abandonando su período vacacional, se personó entonces en la empresa, pero no pudo llevar a cabo el encargo porque la documentación no estaba preparada. Unos días después fue requerido nuevamente por el gerente para que se personara de nuevo en la empresa a través de otro trabajador, al que dijo: "dile a tu colega que si no viene hoy, que ya no hace falta que venga de las vacaciones".
A partir de ese incidente, una vez reincorporado ya a su puesto de trabajo, comenzó a recibir insultos del tipo "vago", "enfermito", "que se creía que era un funcionario" y que "se fuera con los abuelos al Imserso".
Este "trato vejatorio" se agrava cuando el trabajador, que desempeñaba funciones de administrador de sistemas informáticos, con categoría de titulado superior, es trasladado al departamento comercial de la empresa bajo la "coacción" expresa de "esto o a la calle", funciones para las que carecía de los conocimientos mínimos, puesto que es ingeniero informático.
El traslado se produjo en septiembre de 2009, pero el empleado no fue informado de cuáles serían sus funciones, lo que le generó un "estado de ansiedad y estrés", aumentado por el "trato indigno" que personalmente recibía del responsable de Visogsa. Posteriormente, y una vez informado de lo que debía hacer, se le exigía que simultaneara con las funciones de informático.
En enero de 2010, el denunciante fue llamado "vago" en una reunión con el resto de trabajadores presentes y, cuando quería hablar con el gerente de su situación laboral, éste le respondía: "piensa en el pan de tus hijos y no te metas en líos", señala en su querella.
Todo comienza además a agravarse cuando el empleado declara en un juicio laboral por el despido de un compañero de la empresa en julio de 2010 y, cuando en agosto regresa de sus vacaciones, se le impide acceder a su ordenador, lo que empeoró su salud mental.
El 9 de agosto el abogado de la empresa, que actuaba bajo la supervisión directa del gerente, le indicó que Visogsa pensaba que estaba en connivencia con un compañero y que mediante la alteración de datos de registro, éste cobrara el importe de unas facturas que reclamaba. Se llegó a decir que "si no se autoinculpaba, o si no decía todo lo que sabía, le darían la opción de darse de baja voluntariamente de su trabajo a cambio de no presentar denuncia penal contra él".
La situación se prolongó durante días, en los que el querellante no tuvo tareas asignadas que hacer, y finalmente fue despedido e incluso denunciado por los hechos de los que le acusaban.