Agentes de la Policía Nacional, en el marco de la red ENFAST -European Network of Fugitive Search Teams-, han detenido en Madrid a la fugitiva más buscada por la República Dominicana.
La prófuga había cambiado su aspecto físico tiñéndose el pelo de otro color y hacía uso de documentación falsa que había obtenido por más de 1.000 dólares en el mercado negro, con una identidad colombiana a nombre de otra persona.
La presunta acusada, el pasado mes de abril de 2022, tras una acalorada discusión entre ella y el encargado de la ferretería donde trabajaba, cogió de forma sorpresiva un arma blanca de una estantería y lo acuchilló, causándole una herida que finalmente acabó con su vida.
La investigación tendente a la localización de la fugitiva comenzó en julio de 2022, fecha en la que se recibió información de que la prófuga era de extrema peligrosidad y había asesinado a un varón, abandonando inmediatamente el país. A partir de ese momento se inició un trabajo de colaboración internacional realizando varias gestiones indagatorias que se prolongaron en el tiempo durante meses y que apuntaban a que la fugitiva podría trasladarse a España.
Gracias a las investigaciones se logró averiguar el recorrido de huida de la fugitiva. Esta abandonó inicialmente República Dominicana para llegar a Colombia, donde compró un pasaporte falso con identidad colombiana. Posteriormente viajó a Brasil, donde tomaría un vuelo a París (Francia) y acto seguido otro a Barcelona.
Debido a la extrema gravedad de los hechos cometidos y a su gran habilidad para evadirse de la justicia, se consideró por las autoridades dominicanas como la fugitiva más buscada del país.
Gracias al cotejo del material dactilar se pudo confirmar la identidad de la fugitiva. Si bien en un primer momento las indagaciones situaban a la prófuga en la ciudad de Barcelona, tras varias gestiones y rastreos de todas las personas relacionadas con la detenida la búsqueda se centró en el madrileño distrito de Tetuán.
Ante la extrema habilidad de la fugitiva para eludir la justicia y la imposibilidad de localizarla, se llevaron a cabo investigaciones que permitieron finalmente detectar a una mujer que podría tratarse de la buscada. Esta persona sólo salía del domicilio por las noches y, además, cubría su cabello con una red de recogido, lo que dificultaba su plena identificación.
Finalmente, y una vez interceptada, se pudo verificar que se trataba de la fugitiva gracias al cotejo de sus huellas, a pesar de haberse teñido el pelo y de utilizar una documentación falsa.