La Iglesia Castrense de San Francisco, que no es pequeña ni mucho menos, no pudo acoger a cuantas personas acudieron a darle el último adiós a Manuel Prado Fernández en la tarde de ayer jueves. La Corporación municipal actual con la alcaldesa, Patricia Cavada, al frente -el Pleno ordinario del mes de enero que se iba a celebrar en la tarde de este jueves se trasladó a segunda convocatoria- y ex concejales de todos los partidos políticos que han pasado por el Ayuntamiento se dieron cita a las cinco de la tarde en la calle Real para esperar el féretro con los restos mortales del ex concejal andalucista.
A ellos se unieron personas de todos los ámbitos de la sociedad de San Fernando, una presencia lógica por cuando Manuel Prado ocupó distintos cargos municipales, provinciale y regionales, pero principalmente por el talante que demostró siempre de hombre tranquilo, conciliador, atento y respetuoso con todos.
El párroco de San Francisco y arcipreste de San Fernando, Gonzalo Núñez del Castillo, ofició la misa de corpore insepulto tras la cual la comitiva fúnebre siguió camino al crematorio donde sus restos fueron incinerados y sus cenizas descansarán en el columbario de la iglesia de San José Artesano, iglesia del Parque. Manuel Prado Fernández fue intervenido en el Hospital Universitario de Córdoba en la jornada del lunes en una operación que se complicó y llegó al fatal desenlace en las primeras horas de la tarde del miércoles. Los rumores sobre su estado circularon durante toda la mañana hasta que sobre las tres de la tarde se confirmó el fallecimiento. Los restos mortales llegaron al tanatorio de San Fernando en la misma noche del miércoles y eran esperados por familiares y amigos que durante la noche y la mañana de ayer apoyaron a sus familiares.
A Prado se le había diagnosticado la enfermedad hace pocos meses y aunque se trataba de una enfermedad grave no se esperaba un desenlace trágico. Hasta el momento de salir para Córdoba había hecho vida aparentemente normal, siendo fácil saludarlo por la calle. La pérdida de Manuel Prado, del hombre además del doctor en Medicina, profesor de instituto y ex político, se hará sentir durante mucho tiempo. Esa era la frase más escuchada.
