El presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos (PSOE), ha señalado este viernes que los cálculos de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), según los cuales las administraciones locales saldarán 2013 con un superávit de en torno al 0,3 por ciento, ponen de relieve que las administraciones locales son al fin y al cabo las que "sacan las castañas del fuego" a la hora del saneamiento del conjunto de las administraciones.
Todo se encuadra en el real decreto Ley 4/2012, promovido por el Gobierno central del popular Mariano Rajoy para habilitar vías de endeudamiento a fin de que las administraciones saldasen deudas con sus proveedores, aunque a cambio de sacrificios económicos en materia de gastos corrientes e inversiones. Este decreto inicial fue seguido de otros planes similares y el dinero obtenido por las administraciones consistía en préstamos con intereses de hasta el seis por ciento sujetos a una devolución repartida en diez años, los dos primeros de carencia. Los sacrificios aceptados por las administraciones locales, de otro lado, fueron orquestados a través de los denominados "planes de ajuste", que contenían la programación de los ahorros destinados a pagar la deuda contraída.
Los cálculos de la FEMP sobre el cierre de 2013 de las administraciones locales, a juicio de Villalobos, ponen de relieve que "las administraciones más castigadas por la acción de gobierno del PP serán una vez más las que saquen las castañas del fuego en una situación en la que el déficit público volverá a situarse en torno al 6,5 por ciento", puesto que según tales cálculos los ayuntamientos, diputaciones y cabildos insulares volverán a registrar en 2013 un superávit de entre el 0,3 y el 0,4 por ciento.
El cierre en tres o cuatro décimas por debajo del límite permitido de déficit en las administraciones locales supondrá un superávit de 3.000 millones de euros, lo que pone de relieve "la solvencia, el buen trabajo y la lealtad institucional de una administración, la local, que es la que mejor y de manera más responsable está respondiendo en la coyuntura actual a las exigencias", ha argumentado el presidente de la Diputación de Sevilla.
Según Villalobos, el Gobierno central pretende rentabilizar el superávit de 2012 y 2013 de los ayuntamientos con un 'Plan E' encubierto, "sin poner ni un solo euro sobre la mesa". Asimismo, estos datos en positivo deberían servir, según el mandatario provincial, "para que el Gobierno tomara nota de la ejemplaridad del trabajo que venimos haciendo ayuntamientos y diputaciones y, a partir de ahí, suavizara las condiciones de la devolución de los planes de pago a proveedores, que pueden originar el cierre de cientos de ayuntamientos a partir del verano".
En relación con los "perversos efectos" del mecanismo financiero sobre el que se sustentó el pago a proveedores, Villalobos ha vuelto a recordar que "solo en la provincia de Sevilla, la deuda viva de los Ayuntamientos pasó de 873 millones en 2011 a 1.073 en 2012, aumentando en un 25 por ciento y provocando incluso que varios ayuntamientos pasaran a deber más de mil euros por habitante".
Hasta ahora, los Ayuntamientos han venido abonando sólo intereses durante los dos primeros años de devolución, por lo que en el próximo mes de mayo termina ese primer periodo de carencia. A partir de ahí, dichas cantidades se incrementarán, al sumar a esos intereses el pago de la deuda contraída.
