La hija del vecino de Rochelambert asesinado y quemado en 2016 ha reconocido en el juicio el monedero usado para amordazar a su padre y que estuvo perdido
Una de las hijas del hombre asesinado en 2016, cuyo cadáver apareció quemado en su coche, ha reconocido hoy en el juicio contra los tres acusados por el crimen el monedero hallado en la garganta de la víctima, con el que presuntamente fue amordazado, como el que usaba habitualmente su padre.
En el juicio con jurado que se sigue en la Audiencia de Sevilla contra los tres acusados -para los que la Fiscalía pide 36 años de cárcel y la acusación particular 39 años y cinco meses-, han declarado hoy la esposa del fallecido, sus dos hijos, el yerno y su padre, quienes han defendido que la víctima llevaba una vida de "hábitos saludables y rutinarios". Han dicho no conocer a ninguno de los acusados, pese a que uno de ellos dijo tener una relación de amistad con la víctima -Félix J.A., que reconoció el crimen aunque no premeditado y exculpó a los otros-
También han asegurado que la situación económica no era mala, si bien Félix J.A. alegó que medió entre él y una red de nigerianos para duplicar 5.000 euros en billetes y ese fue el origen de la discusión en la que acabó tapándole la boca y asfixiándole. El cuerpo, trasladado al día siguiente en el coche de la víctima donde fue quemado, tenía un monedero en la garganta con el que presuntamente Joaquín B. fue amordazado y acabó asfixiado tras ser golpeado reiteradamente.
Aunque inicialmente no se encontraba el monedero para mostrárselo a los testigos, al no estar depositado como prueba en el juzgado sino permanecer en dependencias del Instituto de Medicina Legal en el que se practicó la autopsia, finalmente ha aparecido y la hija de la víctima lo ha reconocido como el de su padre.
También ha declarado el jefe de Homicidios de la Policía Nacional, quien ha explicado cómo se llevó a cabo la investigación e identificación de los acusados -todos en prisión provisional-. Ha mostrado una foto en la que dos de ellos -Félix J.A. y Manuel B.V.- fueron indentificados tratando de sacar dinero de un cajero el día de los hechos, el 5 de julio de 2016.
La Fiscalía y las acusaciones sostienen que intentaron sacar dinero de la cuenta de la víctima con su tarjeta y la familia ha declarado que constan dos intentos de sacar dinero de la cuenta ese día (uno con un pin incorrecto y otro correcto), si bien ayer Félix J.A. declaró que fue a sacar dinero de su propia cuenta para comprar cocaína y le acompañó Manuel B.V.
El jefe de Homicidios ha señalado que Manuel B.V. fue visto al día siguiente sacando cosas y limpiando el taller de coches de Félix J.A. en el que presuntamente se produjo el crimen, y que en su camisa aparecieron restos de sangre de la víctima. Tanto Félix J.A. como Manuel B.V. limitan la participación del segundo en la quema del coche de la víctima con el cadáver.
En la sesión de hoy también ha declarado uno de los dos compradores de los móviles de la víctima que presuntamente le vendieron tras el crimen Manuel B.V. y Manuel A.P., así como una mujer que ha declarado que este último -que niega cualquier participación en los hechos- estuvo con ella esa tarde en un parque y que venía con un ojo morado.
En su declaración, Manuel A.P. alegó haber ido al taller a consumir droga y se quedó con la víctima mientras Félix J.A. salió a sacar dinero, si bien al volver éste con Manuel B.V. discutieron a cuenta de la cocaína y el primero lo echó del taller, si bien entonces la víctima estaba viva.
Los procesados se enfrentan a los cargos de asesinato, detención ilegal, robo con violencia (de la tarjeta de crédito y dos móviles) y daños (por la quema del coche), mientras la acusación particular que ejerce la familia de la víctima solicita 39 años y cinco meses y añade un delito de profanación de cadáver.
El juicio sigue mañana con el testimonio de los policías que participaron en la investigación y los forenses que hicieron la autopsia.